El BNG llevará al Parlamento de Galicia la controversia vecinal por la instalación de una depuradora de marisco en Castiñeiras. La casa de cultura del lugar acogió este viernes una reunión de residentes con la parlamentaria nacionalista Montse Prado y los ediles del Bloque Luís Pérez y Xosé Vázquez.
Desde el Bloque afirman que a través del trabajo del grupo municipal constataron que la empresa “carecía dos permisos municipais preceptivos, polo que a obra tivo que ser paralizada”.
Pero acusan a la Xunta de actuar con “opacidade” y, por ello, interpelarán a la presidenta de Portos, exigiendo “toda a documentación do proxecto”. También quieren saber si la actuación cuenta con declaración de impacto ambiental.
Culpan a la Lei de Portos de 2017 de permitir el asentamiento en terrenos portuarios de todo tipo de empresas, un texto “feito para favorecer a especulación e promover os intereses privados”, aseguran.