Denuncian restos de botellón en el parque periurbano de Ribeira tras la celebración de San Alberto

El hecho de que la mayoría de los estudiantes ribeirenses que solían subir andando al monte de San Alberto, para participar en la tradicional romería haciendo sus fiestas o botellones, decidiesen desde hace unos tres años no hacer todo ese camino, por considerar que era muy fatigada la ascensión en la que van cargados con sus mochilas llenas de refrescos y bebidas alcohólicas, y concentrarse en el merendero del parque periurbano de San Roque está provocando que gran cantidad de basura quede derramada por ese entorno natural.

Los visitantes que acudieron durante la jornada de ayer hasta este recinto, que está llamado a ser el pulmón verde de la capital barbanzana, se llevaban las manos a la cabeza al ver el panorama que tenían ante sus ojos, e indicaron que no podían hacer otra cosa que denunciar esa situación con la finalidad de que algún responsable municipal tome cartas en el asunto para que no se vuelva a presenciar esta imagen, que aseguran que se repite, al menos, por tercer año consecutivo. De hecho, alguno de ellos contactó a última hora de la tarde de ayer con este periódico para indicar que aquello seguía igual, sin que nadie se hiciera cargo de eliminar la gran cantidad de residuos que generaron un centenar de jóvenes y que no se dignaron en recogerlos y depositarlos en contenedores...

Esas personas que denunciaron públicamente esta situación señalaron que ese no puede ser un ejemplo de la juventud actual, “pois de respeto e educación, cero patatero”, subrayó uno de esos visitantes. Y coinciden en señalar que si se les deja divertirse alegremente en esa zona y no la saben respetar dejando los restos de botellones, lo que habrá que hacer por parte de las autoridades es prohibírselo, poniendo vigilancia en la zona o adoptando algún otro tipo de medida, pues señalan que ya comprobaron como esta práctica se está convirtiendo desde hace tiempo en algo habitual.