El lado especial de la Policía Nacional

Con las gradas de A Fieteira repletas de chiquillos, la Policía Nacional desarrolló  ayer una exhibición de la labor de sus unidades especiales, además de ofrecer la cara amable de este cuerpo de seguridad.  En esta  iniciativa organizada por la comisaría ribeirense, de la que es su máximo responsable el inspector jefe Adolfo García Pinacho, se demostró que su prioridad consiste en ayudar a los ciudadanos, a los que están próximos y a su servicio cada vez que se lo requieran en caso de necesidad, además de la acción represiva contra delincuentes, tal y como indicó el conductor de la demostración, Julio Mourillo. Este subinspector de la comisaría ribeirense indicó que la imagen de ellos usada para dar miedo “está desfasada”. De los “malos” hubo dos simulaciones, con un ladrón de mochilas, que acabó detenido por la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), como el secuestrador de una profesora.

En este último caso, se aprovechó para realizar demostraciones relacionadas con la obtención de pistas y pruebas para poder arrestar al sospechoso, labor en la que incluso se contó con la intervención del helicóptero “Cóndor” durante la persecución a la que se le sometió. La llegada de la aeronave fue seguida con gran expectación desde las gradas por el millar de alumnos de Artes, Palmeira, Frións, Galaxia, Sagrado Corazón de Jesús, La Milagrosa,  Bayón O Grupo y, como invitados, del CEIP A Igrexa de Calo, que al rematar el ejercicio aprovecharon para hacerse fotos con el helicóptero de fondo, además de expresar algunos de ellos que se les había despertado el interés por ser policía nacional dentro de unos años. Y pudieron ver de cerca a los guías caninos -los pastores belgas Mía, Mika y Maya y el cachorro de pastor alemán de trabajo Django- y a los caballos Heinze y Legón y las yeguas Heredia, Hubara, Grulla y Linnete de la unidad de Caballería, de la Comisaría General de Seguridad Ciudadana de Madrid, que previamente realizaron sus respectivas exhibiciones, al igual que los TEDAX y su robot en la desactivación de un explosivo en una maleta, y las motos, furgones y resto de vehículos.