PBBI alerta de que la falta de policías locales causa la desatención de avisos

El Partido Barbanza Independiente (PBBI) advierte que la falta de efectivos de servicio en los diferentes turnos de la Policía Local ribeirense, en los que se dan ocasiones en que sólo hay un agente de plantilla, con el refuerzo de varios auxiliares, provoca que no se puedan atender todos los avisos para los que los vecinos reclaman su presencia cuando se producen de manera simultanea. Su portavoz, Vicente Mariño, indicó que una de las últimas situaciones tuvo lugar al inicio de la madrugada de ayer cuando la patrulla de guardia nocturna estaba realizando las diligencias por un delito contra la seguridad viaria por parte de un conductor que triplicó la tasa máxima de alcohol.

Mariño de Bricio afirmó que tuvo conocimiento de que, en ese instante, los policías locales recibieron varias llamadas por botellones que se celebraban en las pistas polideportivas situadas delante de la Casa do Mar de Palmeira, y que no pudieron atender al estar ocupados en la incidencia reseñada. Añadió que aunque el agente y el auxiliar que integraban la patrulla pudieron acudir al rematar la anterior intervención, “pero fue hora y media después de los avisos y al llegar ya no había ni rastro”. El líder del partido independiente precisó que esto no sólo está pasando por la noche, sino también de tarde. “Es el caso de llamadas que la Policía Local recibe por gente que no hacen uso de la mascarilla en terrazas de hostelería, como marcan las autoridades sanitarias. Pero también por los problemas que tienen los transeúntes para pasar por aceras ocupadas en su práctica totalidad por mesas y sillas de esas terrazas. He podido saber que los policías locales no pueden atenderlas al estar ocupados en otros servicios”, precisó.

Ausencia de oficiales 
Otra situación que denuncia el principal grupo de la oposición que afecta a la Policía Local tiene que ver con la coincidencia de las vacaciones del jefe de servicio y de otro oficial, a la vez que a otro oficial le concedieron días de asuntos propios hasta el próximo martes. “Aunque he sabido que este último acude a primera hora del día para hacer el reparto del servicio, el hecho de que no haya ningún responsable el resto del día provoca una delicada situación, pues el personal no tiene a quien recurrir en caso de necesidad”. Mariño sostiene que para evitar esa situación se debió hacer de otra forma el reparto de las vacaciones para evitar la referida coincidencia, o que de lo contrario se hubiera nombrado un jefe accidental o algún coordinador.

El portavoz del PBBI considera “esencial” la presencia de un jefe al que puedan recurrir los policías y también para que gestione ante las autoridades el refuerzo de los turnos con más agentes de plantilla con horas extras o con la fórmula que se estime oportuno. Añadió que resulta comprensible que en las “tensas noches” que se están viviendo, sobre todo las de los fines de semana o en vísperas de festivos, y con una reducida cifra de efectivos policiales de servicio, “se vean incapaces de controlar los desfases de la movida nocturna”, subrayó Mariño. 

A juicio del líder del PBBI, pese a que se cuenta con el refuerzo de un buen número de auxiliares, “para situaciones como las que se registran en el ocio nocturno se necesita contar con suficiente personal profesional, ya que se tienen que enfrentar a gente que está muy pasada, y que nada más ver llegar a los policías no saben más que decir que ya les van a fastidiar”. Mariño de Bricio indicó que lo que no piensan los jóvenes es que el objetivo de ese control es que cumplan las normas ante la delicada situación provocada por la pandemia derivada de la Covid-19, y evitar, principalmente, aglomeraciones que puedan ocasionar contagios entre ellos.