Tres jóvenes se sentarán el próximo miércoles, a partir de las diez y media de la mañana en el banquillo de los acusados de la sección compostelana de la Audiencia Provincial para responder de las acusaciones de un delito contra la salud pública en la modalidad de sustancias que causan grave daño a la salud, delitos por los que la Fiscalía les solicita a cada uno de ellos una condena de cinco años de cárcel. Se trata de M.F.G.F., M.A.P.M. y J.A.S.H.,, sin antecedentes penales, a los que una intervención conjunta de las Policías Local y Nacional realizada a las ocho y media de la tarde del 25 de febrero de 2017 permitió su interceptación cuando se dirigían en un vehículo por la Rúa Cristóbal Colón, del casco urbano ribeirense, al ser ese un punto frecuente de trapicheo y sospechar que podrían portar sustancias estupefacientes para distribuirlas por la zona, logrando detener a dos de sus tres ocupantes.
El tercero, J.A.S.H., se dio a la fuga, pero los agentes municipales lo arrestaron horas después, en torno a las cuatro menos cinco de la madrugada, y portaba tres puños americanos, uno con púas, motivo por el que el Ministerio Público pide para él otros dos años de prisión por tenencia ilícita de armas. De igual modo, los policías hallaron en su poder una bolsa con 206,4 gramos de hachís, 5,4 gramos de heroína 0,8 gramos de cocaína y un papel con anotaciones, “efectos todos ellos destinados al tráfico”, precisa la Fiscalía en su escrito provisional de calificación de los hechos.
Cuando los agentes municipales y de la comisaría interceptaron el coche en el que iban los tres procesados, la Fiscalía sostiene que era M.F.G.F. el que conducía el vehículo a motor y que llevaba oculta en el interior del mismo una caja fuerte que contenía casi 1.660 euros repartidos en billetes y monedas, así como un teléfono móvil y una tarjeta SIM, dinero y efectos destinados al tráfico de sustancias estupefacientes. Por otro lado, los agentes hallaron en poder del otro acusado, M.A.P.M., 98,6 gramos de cocaína, así como dos teléfonos móviles que se apunta que eran utilizados para el tráfico de drogas. Se calcula que el valor de la droga en el mercado ilícito era de 12.945 euros en forma de gramos y de 22.789 repartida en dosis.
Además, de las respectivas penas de prisión, la Fiscalía les solicita una multa de 45.000 euros con responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago. También pide el decomiso de las drogas uy efectos intervenidos, a los que se dará el destino legal y reglamentariamente establecido.