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lunes | 6 mayo | 2024
Ana Peleteiro disfrutó ayer del cariño y reconocimiento de sus vecinos de Ribeira en un nuevo homenaje organizado por el Concello, para rendirle tributo por su reciente título de campeona de Europa de Triple Salto en pista cubierta en Glasgow, donde además se convirtió en leyenda del atletismo español al establecer un nuevo récord nacional con una marca de 14,73 metros. La deportista más ilustre de Ribeira se volvió a dar un baño de masas en casa. Ya es toda una tradición. Y es que Peleteiro sigue logrando éxitos para el atletismo español, de los que se sienten partícipes familiares, amigos y vecinos de la capital barbanzana.
Los canteranos del Club Atletismo Santa Uxía, donde Peleteiro dio sus primeros pasos en el atletismo, le hicieron el pasillo en la Praza do Concello. La acompañó el alcalde Manuel Ruiz y el presidente de la Federación Gallega de Atletismo, Isidoro Hornillos, en el balcón, desde donde la bronce mundial y oro europea se dirigió a los cientos de vecinos congregados.
Peleteiro empezó su intervención agradeciendo a todas las personas “que perderades o tempo para estar hoxe aquí”. La pupila de Iván Pedroso reconoció que lleva “dous anos moi bos, incribles, nos que o alcalde, todo o Concello e os ribeirenses vos acordades de min e me apoiades en todas as competicións, e iso agradécese moitísimo, sentir o orgullo da tua xente cando estás fóra, sobre todo ese calor dos ribeirenses a través das redes sociais é algo que agradezo moitísimo e fai falla para que continúe a conseguir grandes cousas”, dijo la atleta con la cercanía y la humildad que la caracteriza.
Ana Peleteiro, que da nombre a la pista de atletismo de A Fieiteira, ya recibió la medalla de oro del Concello años atrás, además firmó el pasado en el libro de honor en otro homenaje similar que su pueblo le brindó tras sus éxitos en el Europeo y el Mundial de Pista Cubierta.
Esta vez fue mucho más lejos, tras años de sacrificio, esfuerzo y de superarse a sí misma. Atrás queda el título de campeona del Mundo júnior hace siete años, logrado con la facilidad de una joven atleta dotada para competir. Los últimos éxitos de la arousana no son solo fruto de sus condiciones innatas para el atletismo, son en gran medida el resultado de su entrenamiento diario, maduración y espíritu de superación. Por eso tiene un enorme valor, llegar de nuevo a la cúspide siendo ya una atleta sénior con bagaje, como resultado de un proceso para lograrlo.
Esta vez el alcalde le obsequió en nombre de la corporación con una sudadera con los colores del arco iris y las letras de “Riv/beira, en las que para evitar controversia, la v o la b” fue sustituida por un corazón.
Peleteiro explicó sus sensaciones en las semanas antes al Europeo, que no fueron fáciles debido a una lesión. “Sabía que estaba traballando para iso, sobre todo para o récord de España, pero un mes antes do Campionato de Europa tiven unha lesión que me fixo estar varias semanas case sen poder andar nin adestrar, os meus amigos e a miña familia saben o duro que foi. Tiña unha cousa clara, quería chegar ao campionato e facer a miña mellor marca, pensaba que nin ía a chegar alí, pera na última semana parecía que todo empezaba a rodar e o meu adestrador dicíame que todo o que pase é por algo e agora podo dicir que se non me tivese lesionado no pé no Meeting de Madrid seguramente agora non estaría aquí celebrando esta medalla de ouro, porque son esas dificultades as que nos fan crecer, non só no deporte senón tamén na vida real”.
“A medalla é moi bonita, pero quero que vos quededes co esforzo que hai detrás desta medalla, das horas dedicadas e sobre todo coa superación que tiven que ter no último mes para chegar a Glasgow, olvidarme da lesión que me podía ter roto un óso do pé e deixarme fóra da competición un ano e sobrepoñerme a iso, para aprender e facerme máis forte”.
Peleteiro animó a los más pequeños “a practicar atletismo” porque “é un deporte moi bonito e que se vos esforzades podedes conseguir cousas moi grandes”. Tras su discurso hubo fuegos artificiales y Ana bajó hasta un photocall instalado en la plaza donde todos los asistentes pudieron hacerse una foto con la deportista local más ilustre.
