La temporada del Villalonga podría ser un prólogo escrito por Gabriel García Márquez. Como en Crónica de una muerte anunciada, los de Mariano no pudieron salvar su permanencia en Tercera RFEF. Los triunfos de Arteixo, Barbadás y Valladares sentenciaron a los celestes, que se dejaron el alma en el último enfrentamiento en San Pedro. A pesar de la victoria por 2-1, el Villalonga será equipo de Preferente la próxima temporada.

El Villalonga comenzó moviendo el balón, mientras que el Estradense buscaba los segundos balones. La primera ocasión clara de los visitantes la tuvo Diego Fuentes, después de irse de Juan Barbeito, pero finalmente el balón lo atraparía Rodri. 

Los de Mariano no tardaron en responder, y es que tras una falta sobre Iker Villanueva, Hugo Abalo lograría ponerse delante de Diego, pero Miguel llegaría al despeje. De nuevo, tras una recuperación de Brais Vidal a un mal disparo de Rodri Iglesias, Diego Fuentes volvía a generar peligro en el uno contra uno ante Rodri, que acabaría forzando el córner. 

El Estradense exigía un partido de mucha concentración y, sobre todo, de mucho físico. Dieguito interceptó una acción peligrosa de Mella en la media luna, que regresó el balón a los locales. El Villalonga seguía insistiendo por la banda, pero no encontraban ese último pase de peligro. Hasta que en una recuperación de Rachu por la banda derecha, el siete puso el pase perfecto para que Hugo Abalo rematase para poner el 1-0 en el electrónico. 

Durante los minutos finales del primer tiempo, los de Manuel González contaron con más presencia en área rival, destacando una disparo lateral de Brais Calvo que a punto estuvo de rematar Diego Fuentes, pero Rodri sacó una mano milagrosa para evitar el empate. 

A dos minutos del descanso, el colegiado mostró la tarjeta roja a Nico Fraga por una falta sobre Diego Fuentes antes de la media luna. San Pedro se puso en pie para ovacionar al capitán en su último partido con la celeste. Brais Calvo disparó la falta que acabó tocando en la barrera. Fraga no pudo evitar las lágrimas de frustración tras ver la roja, en una agónica despedida.

Segunda parte

Tras el descanso, San Pedro levantó el telón de una agónica segunda mitad, en la que se decidirían más que tres puntos. Con uno menos sobre el campo, Mariano optó por un 4-4-1 con Iker como figura de ataque. Comenzó atacando el Estradense con una acción de balón parado, en la que el remate de cabeza de Diego Fuentes se fue por encima de los palos de Rodri. Los visitantes jugaban con la tranquilidad del que nada tiene que perder, manteniendo la posesión del balón, por lo que empezaban a sumar más jugadas de peligro. 

A punto estuvo Wachi de anotar el segundo de los celestes en una falta lateral, en la que disparó directamente y el esférico rozó el palo de la portería de Diego. Entrando en el minuto 80, Varo generó una contra peligrosa por la banda derecha, pero no vio a Iago Portas, que estaba solo, y el no pasar el balón a tiempo acabó costando la pérdida del esférico a favor del Estradense. 

Juanin remató de cabeza un centro lateral con la esperanza de empatar, pero el disparo se fue desviado. Varo volvía a montar un contragolpe peligroso, pero Hugo le ganó la espalda para recuperar el balón a favor del Estradense. Con el final llamando a la puerta, Brais Vidal remató de cabeza, pero Rodri volvió a atrapar el esférico. 

En el último suspiro, Marcos Blanco anotó el 2-0, con un disparo directo a portería tras colarse en el área. El delantero no pudo evitar emocionarse, y besar el escudo del equipo que le mostró al mundo. El tiempo jugaba en contra de los de Mariano. Una decepción que parecía inevitable, pero que los locales lucharon hasta el final por revertir. Ya en el tiempo de descuento, Diego Fuentes encontraría el espacio entre el férreo bloque defensivo local para anotar el único gol del partido de los visitantes.

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