Jéssica Bouzas cayó derrotada ante Kamilla Rakhimova  en la primera ronda del WTA 500 de Monterrey (México). La arousana cedió 6-4 y 7-5 en el estadio GNP Seguros del club Sonoma en un duelo jugado a 35 grados de temperatura y marcado por las difcultades con los saque de la joven vilagarciana. 

En el primer set Bouzas Maneiro empezó con buenas sensaciones, dominando desde el fondo de la pista a una jugadora rusa que era capaz de golpear muy fuerte y plano con su derecha. El break en el quinto juego logrado por Bouzas le abría el camino para pensar en apuntarse el primer parcial, al ponerse 3-2 arriba. Pero le faltó finura con el saque ante una rival agresiva con sus restos largos y al cuerpo y que utilizaba globos defensivos esperando los errores de la gallega. Jéssica perdió dos turnos de saque seguidos y se vio 5-3 abajo. Volvió a darse opciones en el set al lograr otro break, pero Rakhimova se puso en modo reactivo al resto en el décimo juego del partido, llevándoselo para apuntarse el set tras 43 minutos y después de que la vilagarciana perdiese su saque por tercera vez seguida.

En el segundo set, Bouzas Maneiro no consiguió solventar su incomodidad al servicio. Lo entregó por cuarta vez en el partido, que se le puso muy cuesta arriba con el 3-1 en contra. Pero consiguió sobreponerse a todas esas dificultades porque era mejor que la rusa en los intercambios. Bouzas le dio la vuelta al marcador y se puso 5-4, sacando para ganar el set. Otra vez no le acompañó el saque y se fue diluyendo muy rápido para entregar tres juegos seguidos y caer 7-5. 

Tras su fugaz paso por México, que le servirá de aprendizaje de cara al US Open, Jéssica Bouzas pone rumbo a New York para afrontar su cuarto torneo de su larga gira americana este verano. Jugará el cuarto Grand Slam de la temporada desde el domingo, instalada desde ayer en el puesto 40 del ranking mundial, la mejor clasificación de su carrera deportiva hasta la fecha.