Rubén Abal (Vilagarcía, 31 años) encabeza a un grupo de socios que abogan por un cambio al frente del Arosa, tras quince años de mandato de Manolo Abalo. "Quiero trasladar a la masa social que sí hay personas que queremos coger el club", empezó diciendo esta mañana ante los medios que acudieron a su convocatoria en una céntrica cafetería de la capital arousana. "Hay un grupo de trabajo y una red de colaboradores que se han ofrecido en los últimos días para presentar un nuevo proyecto para el Arosa a los socios, que son los dueños realmente del club".
Este joven empresario ya formó parte de la entidad hace más de una década, cuando todavía era adolescente. La idea de dar un relevo a Abalo cristalizó a raíz del último partido de liga ante el Alondras, que acabó con nueva decepción en A Lomba. "Llevo viendo el club muy desgastado en los dos últimos años. Lo que ocurrió esta temporada ya lo veía venir", explica. "Y en ese último partido ví muy sola a la actual directiva y al actual presidente". A partir de ahí se puso en contacto con el propio Manolo Abalo, una vez que este manifestó públicamente sus dudas al respecto de continuar al frente del club. "Le dije que me sentía con ganas para darle ese relevo que él pedía".
Perfil
Rubén Abal se inició en el Arosa con 17 años, formando parte de la directiva de Manolo Abalo, y fue el gran impulsor de la imagen del club en redes sociales. Cursó sus estudios universitarios de Periodismo y Empresariales en Madrid, además realizó un máster especializado en dirección de entidades deportivas, con prácticas en el CD Leganés. Completó sus estudios en Estados Unidos. Durante este período formativo se mantuvo vinculado al fútbol en diferentes apartados, en clubes como el Atlético Pinto, tanto en el departamento de comunicación como de entrenador.
Finalizados sus estudios, emprendió al poner en marcha la agencia Be the Best, de representación de jugadores, comunicación y consultoría y asesoramiento de clubes, lo que le permitió conocer desde dentro el fútbol español sobre todo en las categorías REFF, trabajando con diferentes equipos como UD Ourense, Arenteiro o Cacereño.
Al margen del fútbol, hace tres años regresó a Galicia tras hacerse con la franquicia de la cadena de restaurantes ítalo-mediterráneos "La Mafia se sienta a la mesa", poniendo un local en marcha en 2024 en Vigo y ahora tiene previsto abrir otro en Santiago. Abal forma parte de la directiva de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Vigo y del sur de Pontevedra.
Amenazas
"Durante la semana pasada fui hablando con socios vía telefónica. Y esta misma semana hablé y me reuní con más socios, empresarios y aficionados para recoger sus opiniones. Todos con los que hablé me animaron a dar el paso, noté un descontento generalizado", siguió explicando Abal. "Este lunes llamé a Manolo para reunirme con él, pero no encontré la respuesta que esperaba. Se negó a quedar, me dijo que yo era un problema para el club y llegó a amenazarme", relata.
Su idea inicial era contar con el propio Abalo a su lado para iniciar una nueva etapa, pero asegura que no le dio opción. "Quería que él formase parte de la nueva directiva. Es una persona a la que le tengo cariño y que me ayudó cuando yo empecé en el club. Gracias a él entré en el mundo del fútbol. Quería que estuviese porque sería lo más normal y sano para el club, para hacer la mejor transición posible. Él no lo vio de esa manera en la segunda charla. Evidentemente yo tampoco lo querría ahora mi lado, al ser una persona que me amenazó".
Alternativa
Rubén Abal aparece públicamente para dejar claro que sí hay una alternativa en el Arosa. "La actual directiva tiene dos años más de mandato y están en su derecho de continuar, pero creo que los socios deben saber que hay gente dispuesta a tomar las riendas porque esto no es el Manolo Abalo Club de Fútbol. El Arosa ahora mismo necesita un cambio, no hay proyecto ni energía. No digo que se necesite gente joven o mayor, pero sí es necesaria otra perspectiva, más transparencia y otra forma de hacer las cosas".
En contra del cortoplacismo
Abal tiene claro que "hay que sentar las bases de lo que se quiere hacer a dos o tres años vista". Y se muestra crítico con la política que ha seguido el club. "No se ha generado nada de patrimonio, si las cosas vienen mal o hay una recesión económica no hay nada a lo que agarrarse. Se ha vendido mucho humo diciendo que se iba a crear una Fundación y una ciudad deportiva, pero la realidad es que no se ha hecho nada, salvo aportar mucho dinero al primer equipo".
Proyecto
Desde su punto de vista, el Arosa para crecer necesita "darle fuerza a la cantera, que es la tercera mejor de Galicia", además de "marcar una hoja de ruta de donde queremos estar al final de de un período de dos o tres años tras generar una estructura de club"; y también "generar patrominio y otras vías de generación de negocio", con el objetivo de llevar el club como una empresa, algo que él mismo, por su experiencia laboral, ha contribuido en otras entidades deportivas. "Tiene que haber una estructura definida, la directiva marca el camino y a partir de ahí debe haber diferentes competencias definidas".
"Con cabeza"
Abal cree que ascender "es prioritario, pero no el año que viene", y lo explica. "Hay que hacer las cosas con cabeza. El equipo tiene que estar en Segunda RFEF en dos o tres años, con el objetivo de dar entrada a la gente de la cantera. De nada sirve ascender y hacer un equipo nuevo cada año sin dejarle sitio a la base. Una vez en Segunda RFEF hay que estabilizarse, y a partir de ahí ver las necesidades que hay para intentar volver a subir, una vez que hayas vuelto a sentar las bases".
Respaldo
Este socio dice sentirse respaldado por un grupo de veinte personas. "El 100% de la gente con la que he hablado quiere colaborar, bien sea para entrar en la directiva nueva o formar parte de una red de colaboradores". Abal asegura que ya ha formado "un grupo de trabajo de cinco personas, casi todos de la parte empresarial" y que también ha encontrado "no socios que quieren volver al club".
Transparencia
"El club ahora mismo está sin tesorero", denuncia Abal. "No hay unas cuentas claras desde hace unos años. Cuando realmente sepamos cuál es la situación económica del club, podremos empezar a pensar en gasto e inversión a realizar. Lo que tengo claro es que mi idea no es mantener el dispendio que se hace en el primer equipo. Hay que dotar de recursos a la cantera. Pedro Carregal y Perú están haciendo un trabajazo, pero a la cantera hay que dotarla de medios, están luchando contra Celta y Depor, clubes profesionales. Hay otros muchos clubes nacionales y europeos que están viendo futbolistas en Galicia. Eso hay que valorarlo, porque eso también es una fuente de desarrollo de negocio, ya que con el tiempo se generan unos ingresos de derechos de formación a largo plazo".
Escuchar al socio
"Todas las ideas del socio tienen que estar permanemente en la mesa de la directiva para estudiarlas. Y llevarlas a cabo si son viables. Hay que aumentar la masa social y darle voz a la gente. Las directivas tienen que escuchar al socio, que son los dueños del club".
Profesionalización
"No creo en la idea de trabajar gratis. En Tercera RFEF se necesitan al menos tres empleados para temas administrativos, comerciales y dirección general", explica. "Una vez que el equipo esté en Segunda RFEF, incluso hay que aumentar el número porque la exigencia es mayor. Es importante delegar y definir competencias con independencia", reitera.
Motivación personal
"Yo no necesito el Arosa, tengo mis empresas, pero creo que es el momento de cogerlo porque es el equipo de mi ciudad, es mi equipo de toda la vida y sé que se pueden hacer las cosas mejor. Me empuja sobre todo lo que me está transmitiendo la gente con la que he hablado, el 100 % están descontentos y ven que el club está estancado".
Fue en la candidatura de Francisco Vázquez
Rubén Abal habló también de su relación con Francisco Vázquez, al que acompañó en su candidatura en las últimas elecciones y que fue expulsado como socio en una asamblea extraordinaria hace dos años. "Es algo que le fui explicando estos días a los socios. Francisco conmigo en Madrid se portó muy bien y me ayudó a entrar en el Leganés. A nivel empresarial me pidió que le presentara a Manolo y lo hice, pero lo que pasó después entre ambos ya no es cosa mía. Francisco me pidió que fuese en su candidatira cuando se presentó y accedí porque él se había portado bien conmigo y yo estaba acabando la carrera, por lo que era una oportunidad laboral en ese momento para volver a Galicia. Se perdió y creo que sus formas no eran las más idóneas. A partir de ahí me alejé de él. Lo que ha pasado entre ambos lo saben ellos dos", en relación a las desavenencias que mantiene el socio expulsado y el actual presidente.
Sin prisa
Por último, en su comparencia de más media hora, Rubén Abal también lanzó en un mensaje para los socios reacios a un cambio. "Obviamente entiendo que la gente pueda desconfiar porque no me conocen. Llevo nueve años fuera de Vilagarcía. Sólo les pido que me conozcan, estoy abierto a escuchar y esplicárselo a todo el mundo. Yo no tengo ningún problema para entrar en el Arosa ahora o dentro de dos años. Lo importante es que la gente sepa que hay un grupo de trabajo para dar el relevo".