El Gobierno autonómico ha adjudicado las obras de ampliación en un tramo de la avenida de Finisterre (AC-552), a la altura del polígono de Sabón, por un importe de cerca de 885.000 euros.
Los trabajos los llevará a cabo la empresa Arias Infraestructuras S.A. y cuentan con un plazo de ejecución de seis meses. La actuación, explicó el Ejecutivo gallego en un comunicado, comenzará en el punto kilométrico 9+850, antes de la intersección con la calle de Teresa de Calcuta, y finaliza en el 9+760, en el cruce de la AC-552 (A Coruña-Cee) con la calle de la Reconquista, justo antes de llegar a la glorieta de Bajamar.
En concreto, se procederá a ampliar en un carril el margen derecho en sentido Fisterra para contar con dos en esa dirección, además de la correspondiente acera y zona de aparcamiento. La Xunta indica que la actuación tiene como objetivo incrementar la capacidad de la vía y mejorar la fluidez del tráfico en el entorno del polígono de Sabón, que soporta un alto volumen de vehículos cada día.
Rotonda
Además, para aumentar la seguridad vial en el entorno se plantea una glorieta en el cruce de la avenida de Finisterre con la travesía da Groufa, que tendrá un diámetro exterior de 36 metros.
La intervención se completa con la instalación de los elementos necesarios para garantizar el correcto drenaje, muros de contención de tierras y el traslado y acondicionamiento de las dos paradas de bus existentes en el tramo, ejecutando una acera desde los puntos en los que se sitúan hasta los pasos de peatones más próximos. La Xunta intentará, con estas medidas, minimizar las molestias a los usuarios.
La obra se enmarca dentro de las acciones del Gobierno autonómico para mejorar la seguridad vial y, con ello, “aumentar a calidade de vida da cidadanía”
Reordenación del tráfico
Además, en ese entorno se llevó a cabo recientemente una reordenación del tráfico por parte del Gobierno local arteixán en las calles de la Reconquista y la Independencia.
Los trabajos supusieron el cambio de sentido de las vías con la intención de mejorar la circulación en la conexión con la AC-552. Así, Independencia ha pasado a ser de bajada y Reconquista de subida. El proyecto incluyó el arreglo de sendas peatonales y el cambio de la regulación semafórica y desde el Ayuntamiento constatan que ha servido para dar más fluidez al tráfico.
El cambio de sentido de las calles se decidió en una reunión que los vecinos de la zona mantuvieron el año pasado con el regidor y el concejal de Seguridad, José María Sánchez Novo.