Galicia tendrá un verano más cálido de lo normal y con precipitaciones que estarán dentro de la media para esta temporada, según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

El delegado de la AEMET en Galicia, Francisco Infante, ha explicado en una rueda de prensa en A Coruña que la primavera en la comunidad ha sido "húmeda" y "muy cálida", incluso con récord en temperaturas en mayo, el pasado día 29, con 37,7 grados de máxima en Ourense, la más elevada para este mes de la serie de 40 años.

Por lo que respecta a la predicción para los próximos días, la situación de inestabilidad continuará hasta las primeras horas del sábado, cuando está previsto que empiece a ejercer influencia el anticiclón sobre Galicia, ya claramente a partir del domingo, y en "gran parte de la semana que viene".

De hecho, es probable que la próxima semana haya "otro episodio de calor", ha apuntado Infante, ya que a partir del lunes suben las temperaturas en toda España.

El fin de semana del 21 y 22 de junio entrará "un poco de inestabilidad", aunque Infante no ha aventurado qué tiempo puede hacer para la noche de San Juan, ya que "estamos muy lejos todavía para hacer un pronóstico suficientemente fiable", ha dicho.

Sí que, en general, el trimestre de verano -junio, julio y agosto- será "más cálido de lo normal" en Galicia para esta época del año, dentro de la tendencia en España, con una temperatura media que se situará en los valores cálidos.

En cuanto a las precipitaciones, se van a comportar "como un verano climatológicamente normal".
Durante estos primeros días de junio las precipitaciones más significativas en Galicia fueron las ocasionadas por las tormentas, puntualmente fuertes, de las últimas horas del martes 10 y primeras horas del miércoles 11.

En todo caso, para el conjunto de la comunidad, la precipitación acumulada hasta el momento no llega al 20 % de la normal del mes de junio.

También las temperaturas fueron cálidas hasta el momento, con valores medios alrededor de 0.5 °C por encima de los normales de junio.
 

La primavera -los meses de marzo, abril y mayo- fue "muy cálida" en Galicia, con una anomalía en la temperatura media de +0.8 °C, por lo que fue la octava primavera más cálida desde 1961.

El mes de marzo fue frío, el primero que puede calificarse así desde septiembre del año pasado, con temperaturas especialmente bajas el día 2, fecha en la que la estación de Xinzo de Limia registró una mínima de -6.8 °C.

Ha sido un trimestre "húmedo" en cuanto al nivel de precipitaciones, pero "no muy lluvioso", con entre un 8 y un 9 % más de lo habitual, a excepción del mes de abril, con un 50 % más de lluvias de lo normal.

También resultó abril un mes "muy cálido" (+1.9 °C) y ocupa la sexta posición de la serie histórica. Las temperaturas más elevadas se alcanzaron el día 9 con valores como los 31.9 °C de Ribadavia o los 31.8 °C de Ourense.

Mayo resultó "cálido", con una anomalía de +0.9 °C, con una jornada especialmente calurosa el 29, cuando se registraron 37.7 °C en Ourense y 34.3 °C en el aeródromo de Rozas, valores que constituyen récords de temperatura máxima para este mes en sus respectivas series, que abarcan más de 40 años.

Durante este mes hubo tormentas importantes, entre las que destaca la caída en As Pontes (A Coruña) el día 18 de con un total de 50.2 litros por metro cuadrado, de los cuales 25.2 cayeron en tan solo 10 minutos, una auténtica "tromba de agua", según Infante.