El alcalde de Ribeira, Luis Pérez, que fue informado del trágico suceso por la subdelegada del Gobierno en A Coruña, María Rivas, y por la Policía Local y de que se estaban enviando medios y efectivos para tratar de atajar la situación, ha querido hacer un llamamiento a la calma e incidió en que Ribeira es un municipio tranquilo y seguro, y que tiene problemas con robos y toxicómanos, “como calquera outro concello”. Sin embargo, afirmó que la situación que se vivió a última hora de la tarde del martes en Artes “é extraordinaria e non ten comparación algunha con acontecementos poidan terse producido no pasado en Ribeira. De todas maneras, cabe recordar que a finales de septiembre del año pasado se registró otra batalla campal entre otros dos clanes rivales en la zona de Deán, en el que se registraron heridos y que generó una gran preocupación en la ciudad.
El primer edil ribeirense, también dijo que los seis primeros agentes movilizados, de los que dos eran de la Policía Nacional y cuatro de la Policía Local -uno de ellos está en prácticas y otro es auxiliar y ninguno de los dos puede portar armas- se vieron incapaces de contener la pelea con medio centenar de implicados, teniendo que hacer uso de sus armas reglamentarias y dispararon para tratar de disuadirlos, aunque de manera infructuosa, y que luego llegaron los refuerzos. Pérez Barral añadió que la subdelegada del Gobierno en A Coruña le garantizó en las diversas conversaciones que mantuvo con ella que durante los próximos días habrá refuerzo de la presencia policial para evitar represalias ou que esas incidencias se repitan.
Se trata de algo que ya se produjo en la noche del suceso y también a lo largo de la jornada de ayer y que previsiblemente se mantendrá en los próximos días controlancdo el paso en la zona de A Conlleira, donde vide el clan de Ribeira. Y agregó el Ayuntamiento realizará vigilancias especiales con la Policía Local para eviktar que haya cualquier tipo de agresión o vuelva a producirse una pelea entre las dos familais implicadas en la reyerta de última hora de la tarde de este martes.
Finalmente, Luis Pérez, incidió en su defensa de la seguridad de Ribeira, precisando que "vivimos máis de 27.000 habitantes todo o ano, cifra quie se multiplica exponencialmente no verán e a convivencia é completamente amable e non hai altercados desa índole". Seguidamente, agregó que "a situación está agora tranquila, aínda que a poboación está estupefacta ante uns feitos tan graves como os que se produciron este martes". Por último, dijo que la Policía Nacional sigue con la investigación abierta -lo hace de manera coordinada las comisarías de Ribeira y de Santiago de Compostela y en la que se mantiene el secreto de las actuaciones- para, entre otras cuestiones, tratar de saber cuál fue el detonante de la pelea, y confirmó que se produjeron seis detenidos por una pelea que acabó en tragedia -desveló qu, además de los tres arrestados tras una larga persecución e lograr interceptarlos en el peaje de la autopista AP-9, también se practicó el mismo operativob aunque no se descarta que se practiquen nuevos arrestos y, postewriormente, poner a los investigados a disposición de la autoridad judicial.
Por otro lado, tras el trágico suceso registrado el martes en el Centro Recreativo de Artes, la Confederación Española de Policía (CEP) aseguró que ese suceso "se venía venir de lejos" debido a la "falta de agentes en las comisarías gallegas y, particularmente, en las 'pequeñas' como la de la capital barbanzana". En un comunicado remitido a los medios de comunicación, la CEP asegura que "Ribeira, a duras penas, saca un coche patrulla para velar por la seguridad ciudadana" de una localidad que en verano duplica o triplica su población. Así, indica que, en días como el del pasado martes, "dos agentes de la Policía Nacional con la Policía Local tuvieron que hacer frente a dos clanes violentos que atentaron contra su integridad física, un hecho por el que tuvieron que hacer uso de sus armas de fuego".
La CEP hace referencia a las imágenes publicadas en redes sociales sobre el trágico suceso para advertir de la "indefensión" de los policías actuantes ante una "marea de violentos armados con armas blancas y objetos contundentes" a los que tuvieron que hacer frente "con pocos medios a su alcance". Y, precisa que se trató de una situación "tan violenta" en la que "quisieron atentar contra su vida", que "tuvieron que hacer uso de su arma de fuego para evitar ser atropellados por quienes querían eludir la acción policial". Y destaca que "ahora toca dar tiempo a los grupos de investigación de las unidades judiciales de la Policía Nacional para que identifiquen y detengan a todos los violentos", así como para que las "unidades especializadas en orden público mantengan la paz en una ciudad herida" hasta que las "aguas vuelvan a su cauce".
Sin embargo, la CEP avisa de que todo esto "solo es un parche" y Ribeira seguirá contando con "los escasos policías nacionales que tiene hasta la fecha para cubrir sus necesidades mínimas". Dicha organización apunta que, en un contexto en el que la Guardia Civil "pasa por las mismas penurias de personal" por la gestión del Ministerio del Interior que "riega de cientos de millones y miles de agentes a otras policías autonómicas mientras abandona las comisarías de la Policía Nacional y a los cuarteles de la Guardia Civil en Galicia".