Un incendio se declaró pasada la una de la tarde de ayer en la fábrica “Conservas Miramar SL”, ubicada en el lugar de Rianxiño, en el municipio de Rianxo, y obligó a desalojar a los 110 trabajadores que en ese momento se encontraban en el interior de la planta realizando el turno de la mañana. Fueron varios particulares los que en torno a las 13.11 horas contactaron con el 112 Galicia para indicar que estaban viendo salir una densa humareda negra por el tejado de esa empresa dedicada a la limpieza de pescado. Mientras tanto, los empleados eran ajenos a lo que estaba sucediendo en la parte superior de la nave y continuaban realizando sus tareas.

Con la información facilitada, los gestores del servicio de coordinación de las emergencias en la comunidad autónoma gallega dieron traslado del suceso a las dotaciones de guardia de los parques de Bomberos de Boiro y de Ribeira -se movilizaron con el camión autoescalera, entre otros vehículos-, así como a Urxencias Sanitarias de Galicia-061, que movilizó una ambulancia de Soporte Vital Básico (SVB) con base en Rianxo, a la Policía Local, a la Guardia Civil y a la agrupación de voluntarios de Protección Civil. También acudió la motobomba del Ayuntamiento rianxeiro y personal de la brigada de Obras que, junto al resto del operativo desplegado, se dirigieron de inmediato al lugar del incendio. 

En un primer momento se pudo ver a agentes y operarios municipales, además de a empleados de la empresa, tratando de apagar el fuego que se había declarado en una zona intermedia del tejado, junto a la chimenea de una caldera, y las llamas se fueron extendiendo hacia la parte posterior de la fábrica. Luego llegaron los bomberos, que acabaron de apagar el incendio con espuma y agua. Cuando parecía que el fuego ya había sido sofocado, poco después las llamas llegaron a la parte del tejado situada en la zona más próxima a la fachada principal, pero poco después ya se pudo sofocar. 

Atención sanitaria

Un trabajador que estuvo participando en las labores de extinción de las llamas fue atendido por el personal técnico de emergencias sanitarias del 061, que inicialmente le suministró oxígeno y en torno a las dos y cuarto de la tarde lo trasladó al centro de salud rianxeiro debido a que sufrió una intoxicación por inhalación de humo. Sus compañeros, que al igual que él fueron evacuados por las fuerzas de seguridad tras declararse el incendio, aplaudieron a ese empleado cuando era llevado a pie hasta la ambulancia asistencial y él les respondió con un gesto afirmativo mostrando el dedo pulgar de una mano hacia arriba, como señal de que se encontraba bien. El 061 también llevó al ambulatorio de Rianxo a un policía local que igualmente sufrió intoxicación por inhalación de humo tras proporcionales oxígeno. También fueron atendidos por el 061 en el lugar del suceso dos bomberos del parque comarcal boirense por golpes de calor, y a una trabajadora de la conservera por una crisis de ansiedad. Los tres recibieron el alta tras recibir la asistencia.

El material de caucho y el del aislante fueron los que, al parecer, generaron que el humo fuera muy densa y negra. A partir de ahora habrá que esperar a conocer lo que determina el informe pericial que se haga para que, sin entrar en especulaciones, se conozcan las causas que originaron el incendio. Una vez que se dio por extinguido el fuego, que afectó principalmente al falso techo y tejado, se empezó a permitir acceder al interior de la fábrica y en grupos de 10 personas a los trabajadores, en su mayoría mujeres, con la finalidad de que pudieran recoger sus pertenencias.

El alcalde compromete el apoyo a los propietarios de la factoría y a sus trabajadores

El alcalde rianxeiro, Julián Bustelo, manifestó que el incendio en Conservas Miramar “foi un susto grande”, pero que “afortunadamente, non temos que lamentar danos persoais, que é o máis importante neste tipo de situacións”. Respecto a los daños materiales indicó que habrá que cuantificarlos y mirar de arreglarlos a la mayor brevedad posible, para conseguir que la fábrica retome a la mayor brevedad posible su actividad normal, “sobre todo, polo interese da xente que traballa nela”. Respecto a la causa del incendio, el primer edil dijo que él no es la persona competente para decirlo, pero que “cando fagan as inspeccións correspondentes, nos poderán aclarar a orixe. Pero, iso para nós é o menos importante, senón que se extinguira o antes que se puido y non houbese danos persoais”, insistió Bustelo, quien afirmó que estarán a disposición de los propietarios de la factoría para ponerla en marcha lo antes posible y la gente vuelva a sus puestos de trabajo.