Los enfermeros reclaman en O Barbanza la necesidad de su pertenencia al Grupo A y su jubilación anticipada

Enfermeros y fisioterapeutas de O Barbanza, y algunos de Santiago, participaron ayer en el salón de actos del complejo hospitalario de la parroquia ribeirense de Oleiros en una jornada profesional, organizada por el Sindicato de Enfermería (Satse), para abordar la jubilación anticipada voluntaria y la reclasificación profesional en el Grupo A, sin subgrupos. Ana Belén Vázquez y Manuel Fariñas, delegados de Satse, abordaron respectivamente esas dos reivindicaciones que, además de suponer un beneficio para los profesionales, conllevan la mejora en la atención que se presta a pacientes y conjunto de ciudadanos. 

La jornada abordó la problemática de que enfermeros y fisioterapeutas no puedan pertenecer al Grupo A -son del A2-, cuando son titulados universitarios de grado, al igual que otros compañeros que trabajan en el sistema sanitario y en otros ámbitos profesionales que sí tienen esa clasificación. “Se trata de una situación injusta y discriminatoria que imposibilita que estos profesionales sanitarios puedan acceder a determinados puestos vinculados a la gestión y dirección de alto nivel, como por ejemplo, directivo o gerente de centros sanitarios, ni a grupos de investigación y docencia”, indicó Judith Fernández, delegada de Satse en el área sanitaria compostelana-barbanzana.

Y se advirtió de las perjudiciales consecuencias que para su salud y bienestar integral las “peligrosas, tóxicas, penosas e insalubres condiciones laborales que sufren en hasta 40 años de trayectoria profesional”, precisó. Los asistentes vieron plasmadas sus condiciones de trabajo y la repercusión en su salud física, psicológica y emocional, “con la aparición de patologías y problemas de salud asociados al trabajo a turnos y nocturno y a riesgos biológicos, psicosociales, químicos, físicos, mecánicos y otros”, detallaron.