La perra “Raki”, de 8 años y de raza bóxer, es desde la medianoche del martes al miércoles una heroína para sus dueños. Ella fue la que alertó del incendio que se declaró en la planta baja de la vivienda situada en A Mámoa, en la parroquia ribeirense de Carreira. Ocurrió en torno a las doce menos cuarto del martes cuando la dueña estaba acostando a sus dos hijos -un niño de 6 años y un bebé de 6 meses- en un dormitorio de la primera planta, cuando el animal empezó a ladrar y a arañar con insistencia la puerta de esa habitación. Eso llamó la atención de la mujer, pues habitualmente no lo hacía, y al abrir la puerta, ella pudo ver que estaba ardiendo la planta baja, por lo que cogió a los niños y los sacó a una terraza.
La mujer llamó a su marido, que no estaba en casa pero no se encontraba lejos. Al llegar, él hizo uso de una escalera para acceder a la terraza y rescató a su mujer y a sus dos hijos. Además, ella alertó al 112 Galicia, a cuyo personal le informó de que ella y sus dos hijos estaban aislados en una terraza de la primera planta de la casa, a donde habían accedido para escapar de las llamas, precisando que no tenían posibilidad de salir debido al fuego y al humo que se había acumulado en el interior de la casa y que también llegó a la referida terraza. Desde el centro de coordinación de emergencias se avisó los Bomberos de Ribeira, que solicitaron el apoyo de sus compañeros de Boiro, al Grupo de Apoio e Emerxencias Municipal (GAEM), a las Policías Local y Nacional y una ambulancia de Urxencias Sanitarias-061 Galicia.
Cuando llegaron los servicios de extinción ya fueran rescatadas las víctimas, que fueron atendidas in situ por el personal técnico del 061, y luego los Bomberos les recomendaron que acudieran al Hospital do Barbanza para que, por prevención y descartar cualquier posible complicación, les realizasen pruebas y analíticas sobre concentraciones de gases en la sangre. Eso fue algo que hicieron por su cuenta en un primer momento, al igual que más tarde el propietario de la casa. Los cuatro permanecieron en observación en Urxencias del complejo asistencial situado de Oleiros, donde a las nueve y media de la mañana de ayer recibieron el alta al descartarse afecciones.
El incendio, que se registró por causas que todavía se desconocen, se declaró en la zona de la cocina y la despensa, viéndose seriamente dañadas ambas por las llamas, al igual que el comedor y el baño de la primera planta, mientras que el resto de la vivienda se vio afectado por el humo. Los Bomberos indicaron que el fuego estaba muy desarrollado, llegando a salir al exterior de la vivienda por las ventanas de la parte afectada. Además, detallaron que la intervención se prolongó durante tres horas ya que resultó muy laboriosa por la virulencia de las llamas, por la elevadísima temperatura que se alcanzó y por la emisión de gases nocivos.