La programación del Carme dos Pincheiros tocó a su fin por este año y el balance no puede ser más positivo, si se exceptúa que la adversa meteorología deslució las primeras horas en que tuvo lugar el pregón e impidió la primera salida de los gigantes y cabezudos. Ayer fue la jornada dedicada especialmente a los más pequeños con varios hinchables, entre los que había una pista para jugar al futbol y al baloncesto, y la fiesta de la espuma tanto en horario matinal como vespertino, y la afluencia de chiquillos fue numerosa, si se exceptúan las primeras horas de la tarde, cuando la gran mayoría de los niños estaban bañandose en las playas para hacer frente a las altas temperaturas que reinaron durante todo el día.
La oferta festiva de esta última jornada del Carme dos Pincheiros, que era día festivo en la localidad, se completó con las actuaciones de la Banda de Música de Vilaboa y de la Banda de Gaitas de Calo, así como de Xiada, Os Caraveiros, Os do Barro y de los gigantes y cabezudos con sus bailes. Ya por la noche, con temperaturas algo más suaves, pero que no bajaron muchos grados y que invitaban a salir a la calle, fueron numerosas personas las que asistieron a la verbena con la orquesta Furia Joven y Chocolate Disco Móvil, pero especialmente a medianoche, cuando tuvo lugar el tradicional espectáculo de fuegos artificiales y el combate naval, que no defraudó a los que lo siguieron desde la fachada marítima de la villa.