Ruiz renuncia a ser concejal para tratar que el PP mantenga la Alcaldía, pero la oposición pacta una alternativa

Manuel Ruiz se despidió hoy de la corporación municipal de Ribeira en el que fue su último pleno como alcalde en el actual mandato y, además, para siempre. Fue un par de horas después de anunciar su renuncia al acta de concejal, por lo que no optará a la reelección. En una sesión que sólo duró cinco minutos -el único punto del orden del día era la aprobación del acta de la última sesión- también se quiso despedir de todos los trabajadores del Concello, de los que dijo que es para sentirse orgulloso de ellos, además de los vecinos. Pese a que la candidatura que lideró fue la más votada en las pasadas elecciones, el hecho de que los tres grupos de la oposición -BNG. PBBI y PSOE- sumen un edil más hace peligrar la opción de que el PP mantenga la Alcaldía. Como entendió que él era el obstáculo para conseguirlo, indicó que da un paso atrás y que sea su número 2, Mariola Sampedro, la aspirante. Pese a ello, las otras tres fuerzas políticas que los resultados electorales pusieron en la oposición siguen manteniendo reuniones para buscar una alternativa de gobernabilidad que pasaría por un tripartito.

De Mariola afirmó que “está suficientemente preparada e o ten demostrado” y pasará a ser la candidata de la formación política popular para que los populares mantengan la que es considerada como la Alcaldía más importante de O Barbanza y su entorno, y agregó que “é hora de que unha muller sexa alcaldesa de Ribeira”. Cabe recordar que en el mitin central de la campaña, con la participación del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, el propio Ruiz ya manifestó que no se veía de alcalde con 69 años y dejó entrever que cedería el testigo en favor de Mariola Sampedro.

Ayer también comunicó que el partido de la gaviota pensó en él para que su nombre figure en la candidatura popular al Senado por la provincia de A Coruña, y que aceptó. En este sentido, Ruiz manifestó que no busca una vía de escape en la Cámara Alta y que le está muy agradecido a su partido por el hecho de que, sin haberle pedido nunca nada, haya pensado en él para ese reto. Aseguró que, de salir elegido, se le va a dar la posibilidad de “seguir mirando polo meu pobo, seguir traballando por Ribeira”, en cuestiones como incrementar el catálogo de puestos de trabajo de la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía, la realización del paseo marítimo de A Corna y encontrar una solución a los problemas que tienen las cofradías con las potencias de los motores de las embarcaciones.

Ganar las elecciones
Ruiz considera que el hecho de que el PP haya ganado las elecciones debería ser lo que decante quién ostenta la Alcaldía, frente a la posibilidad de que pueda ser para el cabeza de lista de un partido como el BNG que consiguió la mitad de concejales que ellos. “A miña intención non era ter que deixar co Concello de Ribeira, pero se non o fago o máis probable é que acabe gobernando un partido nacionalista, para o que o Concello e a Xunta non son unha finalidade senón un medio para conseguir o seu soberanismo, a súa independencia e ir gañando cachiño a cachiño territorio e poboación. Ribeira demostrou que non é nacionalista nin independentista, Polo tanto, a miña obriga e compromiso con Ribeira faime tomar esta decisión, e espero que sexa comprendida por todos os veciños como un sacrificio”.

Seguidamente, el líder de los populares ribeirenses incidió en que los partidos de centro derecha lograron 15 de 21 concejales, y que cinco de ellos son del PBBI, una formación independiente en la que muchos de sus integrantes fueron antes del PP. Añadió que está convencido de que con ese paso atrás que acaba de dar se está buscando la unión del centro-derecha en Ribeira, es decir, del PP y PBBI, que con su persona por el medio no veía que pueda ser factible. En el último pleno de Ribeira, Ruiz recurrió al símil deportista para decir que los problemas quedan en la caseta o en el terreno de juego, pero que ahora que el árbitro pitó el final del partido, “voume sen rencor e espero que os roces que puideramos ter se olviden”, en un intento por buscar la adhesión del PBBI, cuyo portavoz, Vicente Mariño, declaró tras las elecciones que nunca apoyaría a Ruiz ni a su equipo.