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sábado | 20 abril | 2024
Los cambios en la Praza do Mar y la Praza dos Barcos empiezan a ser ya visibles con el avance de los trabajos para la primera fase de la Batea en Tierra que estarán terminados en los próximos cinco meses. La obra se centra ahora, tras las instalaciones subterráneas, en la cimentación y alzado de los muros de contención.
En aproximadamente quince días comenzará la pavimentación del espacio con losas de granito que se emplearán para cubrir la superficie y también para los bancos. El color de la piedra ha sido elegido tras la prueba de más de diez muestras diferentes.
El elemento central de esta primera fase será la creación de un talud ajardinado que sustituirá las anteriores gradas-escaleras que comunicará la Praza dos Barcos y la Praza do Mar. El diseño de la plantación se inspira en paisajes de costa que salpican el litoral y se intercalan entre las zonas urbanas y los arenales de las Rías Baixas.
Se ha optado por introducir especies autóctonas propias de la comunidad por su resistencia a los vientos, la salinidad y su bajo consumo de agua, lo que conlleva una disminución en los costes de mantenimiento del espacio en base a la reducción de los aportes hídricos, las podas y los tratamientos fitosanitarios. De hecho, solo necesitarán riego el primer año y medio desde su plantación.
Precisamente, con este objetivo serán retiradas las seis palmeras que se ubican en la Praza dos Barcos. Tras consultarlo con especialistas en arboricultura, serán trasplantadas a la zona verde ubicada enfrente del Pazo de Emilia Pardo Bazán y será esta firma especializada la que se encargue de hacerlo en los próximos días.
El objetivo es la creación de un auténtico pulmón verde en pleno centro urbano de Sanxenxo, en el que se plantarán 33 pinos y tamarices, 4.369 arbustos de ocho variedades diferentes y un total de 10.289 plantas. Las especies serán autóctonas, de diferente porte y con distintos estados de floración que permitan tener una variación cromática a lo largo del año.
El jardín generará una continuidad topográfica como un elemento charnela entre la Praza de los Barcos, el Paseo de Silgar, el Paseo dos barcos, el dique y los puertos pesquero y deportivo. Se mantiene un acceso rodado al puerto pesquero por el exterior de la plaza, con carácter restringido, el aparcamiento mantiene las plazas actuales y se mantienen todos los locales comerciales en concesión, sin intervención ninguna, ajustando para ello la pendiente del jardín.
La intervención de esta fase contempla también la rehabilitación y mejora del pavimento en la Praza dos Barcos y su integración dentro del proyecto, la redistribución del mobiliario urbano existente y la simplificación y unificación de todos los elementos de señalética.
