A Cámara Lenta son el grupo revelación del rock y pop español. Incluso lo dice algún premio recibido por la banda catalana, pero, sobre todo, habla el éxito que está teniendo su primer trabajo, “Bendita locura”, grabado en Alemania con el prestigioso productor Thomas Juth. Ellos son Isaac Mordoh, Kiko Ukaje, Miguel García y David Teruel, que habla a este medio del ascenso meteórico de la formación –desde su participación en un experimento audiovisual del “Hormiguero 3.0”– y también de la minigira que harán por Arousa en agosto, con actuaciones en O Grove, A Pobra y en Cambados, el día 6, durante la Festa do Albariño. Será su segunda visita a la localidad.
¿Lo que les ha pasado es una bendita locura?
Se podría decir que sí. Nos ha cambiado la vida este disco y todo lo que sucedió antes de grabarlo fue una locura. En realidad fue una bendita locura.
Lo sucedido en el Hormiguero 3.0 con su tema “1.000 disculpas” fue increíble. Fue una de las canciones virales más escuchadas en Spotify durante un mes. Un éxito repentino como este, ¿cómo se aborda o le aborda a uno directamente?
Nos abordó a nosotros. Ver nuestra canción entre las 50 más escuchadas de España es una sensación que cuesta describir y creo que ninguno estábamos preparados para eso. Aprendimos a gestionar las emociones de una forma muy rápida e intentamos convertir nuestros miedos en virtudes para poder estar a la altura de la situación.
¿Es por eso que es difícil no verles con una sonrisa en sus fotos, apariciones, etc.?
Será por eso (ríe). Cuando la vida te trata bien tienes que sonreírle y cuando no, todavía más. Me imagino que nuestras sonrisas no forzadas, son una manifestación del agradecimiento que sentimos a todo lo que nos pasa.
¿Llegaron a temer que esto fuera un idilio pasajero con la fama, como sucede hoy en día con bastante frecuencia en el ámbito artístico?
No. Siempre tienes miedo a que se olviden de ti, no siempre se puede estar en la cresta de la ola, hay que remar duro para volver a subir a ella, pero después de ver la reacción de la gente con nuestro disco y la aceptación que está teniendo, se nos van esos demonios de la cabeza.
Hay casi 50 mil personas que nos escuchan mensualmente en diferentes plataformas musicales y el disco está agotado en varias tiendas. Eso hace que, desde la humildad y dejando de lado a la prepotencia, le guiñemos un ojo a esos miedos y les lancemos un beso. (ríe)
Sus letras hablan de emociones, sensaciones, etc. Con las que cualquiera se sentiría identificado. ¿Cree que esta es la clave de su éxito?
Nos gusta pensar en la idea de que cantamos historias cotidianas del día a día, eso hace que mucha gente se sienta reflejada en las letras de nuestras canciones y que en los conciertos las canten a viva voz con nosotros. ¿Es la clave del éxito? No lo sé... Si lo supiéramos lo haríamos siempre así. Pero si medimos el éxito por la forma que tiene la gente de hacer suyas nuestras canciones... Podríamos decir que ese es el éxito.
Bueno y las melodías, se ha dicho que recuerda a esos sonidos pop y rock de los 90, tan pegadizos. ¿Está de acuerdo?
Sí. Hacemos un pop rock muy madrileño de los 90. Letras directas sin demasiadas vueltas y que hacen que en el segundo estribillo ya estés cantando con nosotros.
En sus frecuentes apariciones en las redes sociales siempre se dirigen a sus seguidores de una manera muy cercana, llamándoles “familia”. ¿No les gusta la palabra fan?
Nos sentimos más cómodos con esta palabra y nos gusta pensar en el concepto de familia. La familia si caes, te levanta. Si ríes se alegra por ti, si lloras te consuela. Y también te dicen las cosas que están mal. Fan, viene de fanático y ser fanático es ser poco objetivo, es como que soy fan todo está bien. Preferimos que sean nuestra familia y riamos y lloremos juntos y sigamos creciendo juntos.
Galicia está muy presente en su corta pero intensa trayectoria profesional. En su disco incluso cuentan con un cuadro del pintor Abel Barandela. ¿Qué supone para ustedes este rincón de la península ibérica?
Supone sentirnos en casa, supone sentir muchísimo cariño hacia nosotros. Además Galicia es un lugar donde nos encanta estar, por su gente, por su gastronomía, por sus paisajes. Galicia es el lugar donde uno quiere estar. Y si además de todo eso ya cuentas con la amistad y cariño de el gran pintor Abel Barandela hace que los días aquí todavía sean más mágicos. Preparó un cuadro muy especial para nuestro disco. Nos gustó la idea de poder manifestar dos formas de arte en el disco: música y pintura. Ahora vamos por toda España enseñando orgullosos su obra maestra y aprovecho para darle las gracias y a José Notaro, que nos dio la oportunidad de conocerlo y crear esta amistad.
Un año más vuelven a Cambados, pero para subirse al escenario grande de la Festa do Albariño. ¿Qué tienen preparado para deleitar al público cambadés?
Pues tenemos un show de pop rock contundente donde la gente se lo va a pasar fantásticamente bien y podrán cantar y bailar con nosotros. Queremos impregnar en la gente, por medio de nuestro show, la idea de que esa noche está prohibido dormir y solo hay cabida para vivir, saltar, soñar y bailar y que esta vida solo dura un rato y que esa noche es el mejor momento y lugar para estar. Es algo pretencioso, pero nos encanta reflejar esa actitud y método de vida encima del escenario.
¿Cómo se consigue que el ingeniero Thomas Juth, ganador de dos Grammy Award, se embarque en este proyecto?
La gente nos enamoramos de las cosas, y eso es una parte muy importante para la implicación en algo. Le enviamos Bendita Locura y él simplemente se enamoró. Seguramente en la mesa de su despacho tendría trabajos de artistas más consolidados en el panorama internacional. Piensa que este hombre trabaja con Jesse & Joy, Paul McCartney, o aquí, en España, con Manuel Carrasco, Amaya Montero y un largo etcétera, pero se enamoró y le puso toda su alma y magia e hizo que quedara este discazo del cual nos sentimos tan orgullosos.