La directiva del club de jubilados y pensionistas de Portonovo convoca para mañana una asamblea general en la que se realizará un balance de las cuentas anuales y la justificación de gastos e ingresos tras las quejas de socios críticos de la gestión del presidente, Antonio Cacabelos. Los contrarios a la directiva aseguran que cuentan con más de cien apoyos a través de una recogida de firmas para forzar a que se convoque dicha asamblea y que se incluyera en el orden del día, entre otras cuestiones, la apertura de candidaturas a nuevas elecciones, en un plazo máximo de quince días.
Los críticos subrayan que toman este camino para “frenar la marcha de muchos jubilados que se dieron de baja” para inscribirse en otros clubs del entorno. Un resultado, explican, a la falta de transparencia de la gestión, ya que se quejan de la ausencia de información sobre los ingresos de la entidad o la no presentación de facturas que justifiquen los gastos, añaden. No se trata del único punto conflictivo, puesto que también denuncian malas contestaciones por parte del presidente y la pérdida de actividades culturales, que contribuían también a mantener la mente activa de los usuarios.
De igual modo, los críticos sostienen que las elecciones se deben realizar cada cuatro años, mientras que el actual presidente lleva seis en el cargo. Una situación que habría provocado la dimisión de más de una decena de directivos contrarios a la gestión de Cacabelos y que denuncian falta de consenso en la toma de decisiones.
Por su parte, el actual presidente, Antonio Cacabelos, anima a los socios a acudir a la asamblea anual, en la que la directiva explicará el estado de las cuentas, las gestiones realizadas y los retos y proyectos que plantea para el futuro del club de jubilados y pensionistas de Portonovo.