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jueves | 18 abril | 2024
Dos empresas que operan viajes en kayak al islote de O Areoso en A Illa han remitido un escrito a la directora xeral de Patrimonio Natural, Belén do Campo, solicitándole una reunión. Sus responsables se sienten excluidos del proceso negociador de la nueva orden de protección del islote, que regulará las visitas, y consideran que esta normativa, de entrar en vigor en su redacción actual, puede suponer la asfixia y cierre de sus negocios, incluso antes de la amortización de su inversión. Los firmantes del escrito son los representantes de Areoso Kayak Suc y Kayak & Paddle Surf de A Illa, dos de las empresas de este tipo que operan en la localidad, si bien indican que el malestar es compartido en todo el sector, con una media docena de negocios en el municipio insular.
Desde estas empresas indican que presentaron alegación a la futura orden de protección, si bien “non a contestaron”, al menos por el momento, “nin nos chamaron, nin se reuniron con nós”. Lamentan que la administración no acordase la convocatoria de una reunión o mesa con estas empresas, ya que son una parte importante de las mercantiles con intereses sobre el islote. “Somos os primeiros en querer protección para O Areoso”, pero critican que “non se escoitase a nosa opinión”. “As prazas que van poñer parécennos moi poucas”. “Van prohibir todo e nós imos ter que pechar”. Porque, además, tampoco les convence el modelo anunciado de aplicación para concertar visitas al islote: “O lóxico sería que se faga un reparto equitativo entre cada empresa que opera, pero non: O primeiro que chegue, faise con todas”.
Desde estas empresas también plantean posibles soluciones, que ven factibles. Primero, ese citado “reparto equitativo” de visitas. Pero también medidas más flexibles que permitan seguir manteniendo la actividad lúdica y deportiva en el entorno, que podría controlarse “poñendo una caseta cun vixiante”, para lo que están incluso dispuestos a aportar parte de la financiación; la instalación de un pantalán o punto de llegada para los kayak, delimitación de una zona de tránsito, un periodo de adaptación o transitorio y otras medidas constructivas que esperan poder transmitir a la directora xeral, si esta los recibe. Piden para ello la mediación al Concello.
Quieren además que se tenga en cuenta que “o 90 % dos nosos usuarios son persoas ás que lle gusta o medio ambiente, totalmente respectuosas”, de ahí que insistan en una flexibilización de la normativa planteada.
