La Avenida Rafael Picó recuperará el próximo martes el tráfico habitual de entrada y salida de Portonovo tras la finalización de la primera fase de bombeo de O Espiñeiro que comenzó el pasado 23 de abril. En estos días, los trabajos se centran en el asfaltado del tramo del vial afectado y el pintado para su apertura y ya a partir de septiembre se pondrá en marcha la segunda fase.

Las primeras actuaciones consistieron en la sustitución de la tubería por una de doble capacidad a nueve metros de profundidad. En la segunda fase,  que comenzará en septiembre, se continuará con el trazado de la tubería a lo largo de 250 metros hasta el centro de salud de Baltar. 

Además, se colocarán cuatro nuevas bombas de impulsión y se instalarán rejas y trituradoras más grandes para trocear cualquier sólido, mejorando el envío de las aguas residuales hacia la depuradora de Paxariñas.
Las obras del bombeo de O Espiñeiro forma parte de un proyecto más amplio de mejora de la red de saneamiento y depuración incluido en un convenio entre Acuaes, Poio y Sanxenxo con una inversión de 24 millones de euros.

Semáforo adaptado al tráfico 

El semáforo de As Salinas, que regula la circulación de peatones entre A Revolta y la playa de A Lanzada, estrena mañana un nuevo sistema de regulación de los tiempos de espera de vehículos y peatones para favorecer la fluidez de tráfico y garantizar la seguridad vial. 

Hasta ahora el semáforo estaba en ámbar todo el tiempo y era necesario pulsarlo para que cambiase a verde para los peatones y a rojo para los vehículos. Ahora, estará siempre en verde para vehículos y se pondrá en rojo cuando le pulse el peatón.