7º-16º
lunes | 29 abril | 2024
La publicación del proyecto de orden para regular los usos de los islotes de Guidoiros, con O Areoso (A Illa), y Rúa (Ribeira) ha generado algunas controversias entre los usuarios que frecuentan estos parajes naturales o que explotan su utilización. En su exposición pública, que finaliza el 9 de noviembre, se han recibido ya en torno a una veintena de sugerencias o alegaciones, y hay preocupación entre las empresas turísticas.
El Clúster de Turismo señala que, tras una primera revisión de las medidas adoptadas, consideran que “son bastante restrictivas” y que “limitan mucho” el desarrollo profesional de las empresas del sector. “Nos trasladaron que están especialmente preocupadas”, ha declarado el Clúster sobre las empresas que lo integran.
A esto se contrapone la opinión mayoritariamente defendida durante años desde A Illa. El alcalde, Carlos Iglesias, resume que “estamos de acuerdo con el documento, consideramos que el texto es correcto”, ya que, “efectivamente, hay que proteger todo el ámbito”. Con todo, también detalla que en el Ayuntamiento les consta que empresas de prestación de servicios creen que, “a lo mejor el aforo y el acceso al medio litoral terrestre es insuficiente”.
Esto lo ratifica el propio Clúster, que considera que el texto articula “medidas más restrictivas que las que se aplican en el Parque Nacional de As Illas Atlánticas”, por lo que previsiblemente se sumarán a las alegaciones.
En el otro margen de la Ría de Arousa, el alcalde de Ribeira, Manuel Ruiz Rivas, señala que en las reuniones que ha tenido con la directora xeral de Patrimonio Natural, Belén do Campo, se han tratado las cuestiones que ellos consideran que se “pueden mejorar” y la ha visto “receptiva en el sentido de variar y permitir otros aspectos, como es la pesca deportiva”.
Ruiz Rivas también ha indicado que en la orden hay unos anexos que “podían inducir a la confusión” sobre si se podía pasar o no por los lugares delimitados y ha remarcado que “ya se le ha aclarado que no” lo que le ha tranquilizado.
Otro de los aspectos que le ha planteado a do Campo ha sido en relación a “no poder desembarcar en Rúa”. Así, el alcalde incide en que ese islote “no tiene que ver orográficamente con ninguno de los otros”. “Es de piedra y es rarísimo ver a una persona en el verano”, ha determinado el regidor ribeirense. Con esto, subraya que “no hay ni presión sobre ese islote, ni ningún problema ambiental en que se pise una piedra”, por lo que ha pedido que se estudien modificaciones al respecto. Su “principal preocupación” es la pesca deportiva y competiciones de otros deportes.
En lo que respecta al acceso al islote, el primer edil de A Illa apunta que “va a ser siempre” con autorización previa de la Xunta y, aunque todavía no está desarrollado, avanza que “seguramente sea por aplicación móvil e Internet”. “Nosotros creemos que el procedimiento será igual al de otras islas donde hay que solicitarla como es el caso de Ons o Cíes”.
