Ruta Valle-Inclán | ¿Dónde tomaba los vinos el padre del esperpento en Cambados?

Seguramente Ramón María del Valle-Inclán paseaba por la Praza de Fefiñáns. También es posible que tomara vinos y se reuniera con amigos en una taberna ya desaparecida de Rúa Real, frente a su casa. Las anécdotas –algunas escritas– sobre los cinco años que vivió en la capital del albariño, no faltan, pero sí certezas. “Nin sequera sabemos cando marchou exactamente, só que foi no 1917”, apunta uno de sus nietos, el incombustible Xaquín. La cosa es que el Foro Galicia e Valle-Inclán lo está investigando porque estos momentos, junto a los vividos en A Pobra y Compostela, supusieron “os anos máis produtivos e de maior calidade. Valle e Josefina –con la que estuvo casado– o dicían, que atoparon na Ría de Arousa un lugar de retiro necesario para poder centrarse na produción literaria”, explicó el director del Museo de A Pobra, Antonio González. 

Conociendo un poco al padre del esperpento y teniendo en cuenta el privilegiado marco  cambadés social, patrimonial, cultural... su descendiente sospecha que en la ruta literaria creada junto al Concello habría que “poñer todo Cambados”. No obstante, a falta de concretar los lugares más emblemáticos, el itinerario une dos ubicaciones indudables: la vivienda que ocupó la familia entre 1912 y 1917, en Rúa Real, y el cementerio de Santa Mariña, donde reposan su exmujer y su primer hijo. 

La iniciativa se presentó hace unos meses, pero estará activa esta misma Semana Santa mediante un folleto con ilustraciones y textos sobre su presencia en la villa y un plano que discurre entre esos dos puntos, pasando por reclamos turísticos de la localidad. Y es que también tiene esta vertiente, pero el concejal de Cultura, Tino Cordal, explicó que solo es un primer paso para establecer un programa de “actividades culturais anuais para conmemorar e poñer en valor o que supuxo para Cambados”.

Dio a conocer la localidad

En tierra de otros grandes literatos como Cabanillas, escribió Valle-Inclán “dúas das súas obras de maior calidade artística, “La lámpara maravillosa” y “El embrujado””, apuntó el director del museo pobrense. Pero es que además puso al municipio en el mapa, con la invitación de amigos notables de la sociedad de aquella época como el diplomático francés Jacques Chaumié, el escritor Corpus Barga o el pintor Zubiaurre, que pintó el poco conocido “Hombre de Cambados”. Muchas de estas visitas pasaron casi desapercibidas, pues hace cien años no había prensa dedicada en especial a la capital del albariño, pero lo que tienen claro es que figuras como él pusieron la semilla para darla a conocer. De hecho, “os xornais a chamaban a Suiza galega”, aseguró González.

Ruta en catamarán

Y ahora que Cambados es “vila valleinclaniana”, el deseo del Foro es que los actos en torno a su figura y obra tengan continuidad. Cordal se ha comprometido y ayer se hablaba de un viaje en catamarán desde A Pobra y aderezarlo con una exposición y, por supuesto, una representación teatral de alguna de sus obras; un deseo que expresó su directivo Ángel Varela.