Sanxenxo talará los pinos del parque de Baltar y saneará los del paseo ante el riesgo de caídas

Los pinos de Baltar no están bien. La caída de varios ejemplares y ramas durante el pasado invierno ha llevado al Concello a encargar dos informes a la Estación Fitopatolóxica do Areeiro que recomiendan su tala en el parque de Baltar y la poda de los ejemplares del paseo. El departamento de Medio Ambiente, dirigido por Yago Torres, analizará, además, de forma preventiva, los ejemplares de árboles de los espacios verdes públicos más transitados para conocer su estado.

Según confirma el gobierno local, en el estudio realizado en el parque de Baltar, ubicado enfrente del campo de fútbol y al lado del pabellón, los técnicos recomiendan la eliminación de la totalidad de los pinos “pensando en que pola súa arquitectura esfiada e inadecuadas relacións copa e fuste e altura diámetro teñen certo risco de rotura ou caída”. 

En el informe, reconocen que es la “opción máis agresiva, pero é a que se debe considerar si se desexa eliminar a posibilidade de que poidan causar danos ás persoas ou ás infraestruturas” e inciden en que “o risco cero non existe incluso con árbores totalmente sas e sen problema de estabilidade aparente, pero en casos coma os destes piñeiros aínda é máis complicado reducilo”. Al mismo tiempo, una vez retirados los ejemplares, el Concello diseñará una repoblación con árboles bien distanciados para que crezcan de una forma correcta. En cuanto a las especies frondosas, aparte de las labores típicas de vigilancia, la estación Fitopatolóxica do Areeiro recomienda: Trasplantar si es posible algunos de los pies que están muy próximos, sanear los cortes de poda mal realizados y aplicar después del nuevo el corte una pasta hecha a base de un fungicida de cobre.

Reestructurar las copas

El informe realizado sobre el pinar del Paseo de Baltar recomienda reestructurar las copas más inestables y con ramas secas realizando podas en forma de bisel, sanear las ramas de grandes dimensiones e ir eliminando progresivamente los árboles con arquitectura más deficiente a nivel estructural para permitir el crecimiento de los ejemplares. También se plantea retirar el tronco en forma de silla para evitar la atracción de hongos patógenos que pueda poner en peligro al conjunto del arbolado. Además, se propone destruir todos los restos de poda y tratar las cicatrices con un fungicida. 

“Con estas medidas preténdese unha mellora do estado e condicións das árbores do conxunto e reducir os riscos de danos pola rotura e caída de ramas. Eliminar completamente o risco e inviable polos numerosos factores que poden ter incidencia na estabilidade”, puntualiza el informe.