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jueves | 9 mayo | 2024
La inversión necesaria para sacar adelante el centro de talasoterapia de O Terrón en Vilanova se ejecutará entre los años 2023 y comienzos de 2026. Así consta tanto en el estudio económico como en la memoria de viabilidad económica que el Concello expone al público actualmente, en plena fase de información pública del plan especial de O Terrón, el documento urbanístico necesario para desbloquear el proyecto, que sigue adelante con su tramitación.
Además, según la citada documentación, consultada por este Diario, la duración de la concesión que permitirá la ejecución y explotación del complejo será de cuarenta años.
Según el cronograma que obra en dicho expediente, la realización de la inversión económica prevista se divide en tres etapas. La primera incluye la tramitación y finalización del propio plan especial, ya en curso. Su desarrollo y papeleo podría ocupar todavía los tres primeros trimestres de 2023. En el trimestre final de esa anualidad, también se financiará la adquisición de los terrenos que el Concello de Vilanova tiene todavía pendientes de comprar en esta zona de O Terrón. Se trata de 11.595 metros cuadrados, para lo que se estima necesaria una inversión de unos 92.928 euros, que tendría que financiar el Ayuntamiento.
Esta compra de terrenos debería ejecutarse “en un plazo de seis meses contados desde la entrada en vigor del plan especial”.
Las dos siguientes etapas serían las de inversión en las obras. Podría arrancar también a finales de 2023, según este cronograma. Se trata, por un lado de los trabajos de urbanización del entorno, que deberá asumir el Ayuntamiento, y que incluirán la red viaria, el ajardinamiento de los espacios libres y las redes de instalaciones y servicios, como agua, saneamiento y telecomunicaciones. Además del emisario y captación para la toma de agua de mar, prevista para poder disfrutar de ella en el talaso. Todo ello, por 1,4 millones de euros.
La etapa tres es la realización de la inversión económica prevista para la obra constructiva del edificio, que deberá asumir la empresa que resulte adjudicataria, por algo más de seis millones de euros.
La citada etapa 2, correspondiente a las obras de urbanización a cargo del Concello, se desarrollaría en un año, mientras que la 3, la ejecución de la edificación del talaso, “se ejecutará en dos años”, siempre según este estudio económico. Algunos de los trabajos de la fase 2 y 3 podrían incluso solaparse, pero según el mismo cronograma, todo debería estar concluido para el primer trimestre de 2026.
El cuadro de inversiones para el Concello fija en 2023 la financiación de la compra del suelo restante, por los citados 92.928 euros. En 2024, se programa la financiación del emisario y captación marinas (215.985 euros), así como el tendido eléctrico necesario (287.980 euros). En 2025, se imputarían las obras en zonas pavimentadas (575.600 euros), mientras que en 2026 se correría con los gastos de las actuaciones en los espacios libres (64.020 euros) y en los espacios naturales (143.640 euros).
No obstante, de prosperar finalmente el proyecto, el Ayuntamiento también ingresará unas cantidades importantes de dinero. Así, el Concello recibirá 119.820 euros en concepto de impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras (ICIO) y licencia. El ingreso más notable, no obstante, será el que percibirá por la concesión, 1,3 millones de euros, que deberá abonar la empresa que resulte concesionaria del servicio e instalación, completando así un total de 1.419.820 euros a ingresar en esta fase de desarrollo.
Tras la ejecución de lo previsto en el plan especial, el Concello se beneficiaría de un ingreso anual de unos 1.190 euros, correspondientes al impuesto sobre bienes inmuebles (IBI).
Según esta documentación, el centro de talasoterapia supondrá en total una inversión de 9.047.386,50 euros, entre la parte que financiará el Concello y la que deberá asumir la empresa, siendo esta última la de mayor cuantía, por valor de casi 7,6 millones.
