El director de Turismo de Galicia, Xosé Merelles, en compañía del alcalde de Valga, José María Bello Maneiro, visitó ayer el espacio de la mina de arcilla de Porto Piñeiro, en Valga, donde se llevará a cabo una nueva fase de obras de restauración ambiental para su impulso turístico.
Estas actuaciones se engloban dentro del Plan de Sostenibilidad Turística del geodestino Mar de Santiago dotado con 1,7 millones de euros de presupuesto para poner en valor los recursos turísticos de la zona y del que forman parte -además de Valga- Vilanova, Catoira y Pontecesures.
Concretamente, en la actuación que se prevé en Valga, entre las principales líneas está la restauración de la mina de Porto Piñeiro, donde se creará una playa artificial.
Estas acciones concentran una inversión de 575.000 euros y tal y como estipula el contrato deberán estar finalizadas antes de mayo de 2026.
Aunque por el momento solo se plantean las actuaciones mencionadas, el objetivo del gobierno local es convertir esta zona en una espacio de referencia ambiental y social con piscina, área de usos recreativos y de ocio, una zona deportiva y más. Un proyecto que saben que es “ambicioso”, pero en el que confían.