Las plazas de aparcamiento de la zona de O Ramal, en Vilagarcía, quedarán inhabilitadas a partir de mañana debido al inicio de las obras de mejora de la fachada marítima. Así lo señalan desde el Concello, que explican que la empresa adjudicataria de los trabajos –Marconsa– y los técnicos municipales estuvieron marcando sobre el terreno el pasado viernes la situación de los servicios y redes y planificando el desarrollo de los trabajos. Cabe recordar que, inicialmente, los plazos que se manejaban es que la obra empezase a finales del mes de junio, algo que se ha retrasado prácticamente hasta julio. Desde la administración local indican que estos retrasos vienen dados porque la empresa se encargó durante todo este mes de cerrar todos los trámites pendientes como son la firma del contrato, la designación de la dirección de seguridad y también el levantamiento del acta de replanteo, en la que además del Concello intervino también la Autoridad Portuaria.
Así pues mañana empezará el vallado de todo el entorno y la llegada de las primeras máquinas para, inmediatamente, iniciar la demolición de los elementos que hay en el lugar. El aparcamiento quedará totalmente cerrado debido a esto. Según el Concello la importante pérdida de plazas en este punto –que se utilizan tanto para aquellos que van al centro urbano como los que dejan el vehículo en esa zona para coger el tren en la estación– se compensan con las del parking disuasorio de la Rúa Mulatas y también con el depósito municipal de vehículos. Este último todavía no está operativo, pero la idea del ejecutivo local –como ya se había dicho– es convertirlo en estacionamiento público y bonificado.
El Concello indica que estas dos bolsas de aparcamiento están a dos minutos andando desde O Ramal. Además aseguran que –cuando terminen las obras– se recuperará alguna de las plazas perdidas ahora.
Eso sí, no será hasta la próxima primavera, que es la fecha límite que se fija para la finalización de los trabajos.
El proyecto –una de las propuestas estrella del gobierno de Alberto Varela– busca recuperar esta parte de la fachada marítima. En total son 4.300 metros cuadrados en el que se colocarán alrededor de un centenar de árboles y una gran pradera en la que no faltará un estanque de agua, recordando así su origen.
Además de los paseos de conexión del parque con la playa de A Concha-Compostela en la zona habrá también un kiosco-cafetería y terraza rodeados de vegetación.
El Concello recuerda que el proyecto sigue las recomendaciones europeas para adaptar las ciudades al cambio climático y –especialmente– al mayor número de olas de calor que se están registrando. Indican, de hecho, las temperaturas que se están registrando este mes de junio, las más altas de las que se recuerdan para esta época del año.
La actuación forma parte de un plan más ambicioso para integrar el muelle de O Ramal en la zona urbana, dado que la mitad de los terrenos son de titularidad municipal tras el acuerdo de compra (que incluyó también la parcela del Centro de Saúde) con la Autoridad Portuaria.
Ravella asegura que, de forma paralela a la recuperación de estos espacios para los peatones, el gobierno municipal sigue buscando nuevas áreas de aparcamiento para vehículos dentro del programa VaiCar!. Señalan que las próximas serán en Carril y en Os Duráns, actualmente en trámite. A ellas –exponen– se suman la citada conversión del depósito de vehículos en un nuevo parking público (con el proyecto ya casi ultimado) y la modernización del Xoán XXIII, ahora de titularidad municipal. De hecho el pasado jueves en el pleno se aprobó la partida para adquirir nueva maquinaria para lograr ese fin. l