El Concello estudia adoptar medidas para evitar caídas en la Praza de Galicia

El Concello de Vilagarcía estudia adoptar medidas para evitar las caídas en el estanque de la Praza de Galicia. Unos percances que desde el equipo que preside el socialista Alberto Varela atribuyen a “despistes” y recuerdan que el proyecto cumple con la “normativa de accesibilidade para espazos públicos”.   
Aún así, para “tranquilidade” de la ciudadanía, “quen é quen realmente importa”, se destacarán los límites “na zona da ponte, de xeito que a ninguén lle poida pasar desapercibido onde remata a pasarela e empeza a canle”. 
El gobierno local tomará medidas de forma inmediata. La primera, de forma inminente y provisional, se procederá a la colocación de unos maceteros en el borde del estanque.

Mientras tanto, los técnicos municipales comenzarán a estudiar “cal é a solución máis idónea e acorde co proxecto, medida que se executará posteriormente e con carácter definitivo”. En cualquier caso, desde Ravella apuntan que “por moitas medidas que se adopten nunca estará garantido que non se produzan caídas por distraccións, nin aí nin en ningún outro lugar”.

La administración municipal insiste, de todas maneras, en que “tanto a obra como o proxecto cumpren con todas as normativas vixentes para espazos públicos, tanto de seguridade como de accesibilidade, do contrario non podería terse aprobado nin executado. Sobre la inseguridad, el ejecutivo socialista incide en que la que puede tener la obra “é a mesma que pode ter a ponte peonil de Vista Alegre, as pontellas do parque da Coca ou o peirao de pasaxeiros. A única diferencia é que a esas estamos acostumados e ninguén as cuestiona”.

Incidentes
Son cinco ya las personas que sufrieron distintos percances en Praza de Galicia. El último se produjo ayer por la mañana y afectó a un hombre de edad avanzada. Lo cierto es que la mayor parte de las personas que cayeron o se mojaron en el estanque eran mayores. La situación generó diversas críticas entre los ciudadanos, de las que se hicieron eco formaciones como En Marea, que el martes pidió al gobierno que estudiase correcciones en la obra.