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jueves | 25 abril | 2024
El Concello de Vilagarcía quiere contar este año con 12 socorristas para sus playas. De hecho, el próximo lunes aprobará la solicitud de la subvención a la Xunta para sufragar los costes salarias y le pedirá también que le permita iniciar el proceso de contratación antes incluso de que resuelva la concesión de la subvención porque teme retrasos que impidan la presencia de los vigilantes a tiempo en los arenales, sobre todo en el caso de los que ostentan la Bandera Azul, pues es un requisito obligatorio.
El temor de Ravella tiene su fundamento. La administración autonómica aún publicó el pasado lunes la convocatoria de ayudas y el verano está a la vuelta de la esquina. Además de la burocracia, el Ayuntamiento se puede encontrar con otros problemas, como ya ha sucedido en anteriores ocasiones, y es que no haya aspirantes para cubrir todas las plazas ofertadas.
Cuantías
Uno de los motivos, según el gobierno local, eran los salarios. Algunos candidatos se presentaban en el mayor número posible de localidades y una vez admitidos elegían el salario más conveniente. De hecho, para evitarlo, el año pasado se aprobó un complemento municipal a los 700 euros al mes, aproximadamente, que percibían mediante el convenio con la Xunta y adoptará esta medida por segundo año consecutivo. Por el momento no ha indicado si será en la misma cuantía (el año pasado el salario final quedó en unos 1.068 euros al mes).
La Xunta de Goberno Local abordará este asunto el lunes que viene y aprobará la solicitud de ayuda. Fuentes municipales explicaron que solicitará subvención para contratar a 12 trabajadores.
Riesgo para llegar a tiempo
En años anteriores Ravella llegó a pedir para 15, pero solo le concedieron para 11. De hecho, quiere iniciar el trámite para contratarlos antes incluso de que se resuelva la concesión de la ayuda y así se lo pedirá al gobierno autonómico. Si finalmente no puede alcanzar la cifra deseada deberá ajustar la plantilla, teniendo siempre como prioridad a O Preguntoiro y Campanario, pues tienen Bandera Azul y si no cuentan con este servicio desde el 1 de julio, la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (Adeac) puede retirarle este galardón, que se concede, entre otras cosas, por la calidad excelente de sus aguas y de sus servicios en general. Ravella prefiere arriesgarse porque teme que los plazos se le echen encima. Hay que tener en cuenta que hay unos trámites administrativos detrás como la convocatoria de las plazas, los periodos de alegaciones, la realización de las pruebas de validez, etc.
Para todos los arenales
Aunque estos arenales ubicados en Vilaxoán y en Bamio están los primeros en la lista, Ravella también quiere dotar al de A Concha-Compostela de este servicio, teniendo en cuenta que el número de usuarios siempre es mayor que en los otros dos, principalmente porque está más céntrico y es más cómodo para los residentes en la ciudad. l
