Es una de las joyas arquitectónicas de Vilagarcía y ayer amanecía totalmente maquillada por el spray de los vándalos. El complejo de Vista Alegre y el entorno del colegio de las Filipenses ha sido víctima de un atentado contra el Patrimonio que todavía se está investigando. Lo cierto es que todos los que ayer pasaron por el entorno pudieron comprobar con sus propios ojos las pintadas de colores que poblaban los muros de piedra del convento y también las puertas y las rejas de la zona.
Pintadas de spray con insultos, símbolos y lemas de poco gusto modificaron por completo un edificio que está protegido por Patrimonio y cuya limpieza habrá que ejecutar por parte de las administraciones. No se sabe todavía si las monjas del convento de Vista Alegre han presentado una denuncia formal por los hechos. De encontrarse a los autores de las pintadas estos se enfrentarían a un delito de atentado contra el Patrimonio, con sanciones económicas elevadas y con la obligación de abonar el coste de la limpieza. La preocupación está ahora en cómo se puede ejecutar la retirada de esas pintadas sin dañar el conjunto aún más. De hecho es previsible que haya que pasar un informe a Patrimonio para que sean los técnicos de este departamento los que determinen cual es la mejor forma de terminar con las pintadas.
Los mensajes que dejaron plasmados en el conjunto arquitectónico de Vista Alegre tienen menciones satánicas y también políticas. No es la primera vez que estas firmas con spray aparecen en otros edificios y paredes de Vilagarcía. n