El nombre de Tania Varela ha vuelto a la actualidad porque la Audiencia Provincial de Madrid celebra estos días el juicio por el asesinato a tiros del abogado Alfonso Díaz Moñux, que era su pareja sentimental y con el que estaba en el momento de los hechos. De hecho, las partes consideran fundamental su testimonio e iba a participar en calidad de testigo pero la cambadesa está en paradero desconocido.
Fuentes jurídicas señalaron ayer que se intentó citar a Varela para que se presentara en la vista pero no tiene domicilio conocido. Resulta que su dirección debería ser la prisión pues, a pesar de haber pasado unos meses en provisional, presuntamente tenía pendiente parte de una condena por su relación con un grupo de narcotraficantes, entre ellos, el hijastro de Oubiña, David Pérez Lago, con quien, dijo, que había tenido una relación sentimental mientras que él siempre lo negó.
detención
Ambos fueron detenidos, junto a otros, por un alijo de cocaína de dos toneladas, incautado en Corme, en 2006, pero Pérez alcanzó un acuerdo con la Fiscalía y fue condenado a nueve años de prisión; mientras que la abogada siempre defendió su inocencia pero finalmente se le condenó a siete años de prisión. Varela recurrió la sentencia y en enero de este mismo año, el Tribunal Supremo desestimó su petición ratificando la condena. En ese momento tendría que haber ingresado en prisión pero aprovechó para huir de España, según señalan algunas fuentes. De hecho, otras, conocedoras también del caso, apuntan a que la Interpol intenta dar con su paradero, después de que se haya dictado una orden de busca y captura. Desde Instituciones Penitenciarias, por su parte, indicaron ayer que no se realizará ningún comentario al respecto.
testimonio clave
Su testimonio sería fundamental para el juicio con jurado popular que se está celebrando estos días en la Audiencia Provincial de Madrid. Hay un total de ocho procesadas por el asesinato de Díaz Moñux, ocurrido en 2008, en su garaje, ubicado en el barrio de Chamartín, y en presencia de la cambadesa, con la que tenía una relación sentimental.
La defensa de la familia de la víctima y de uno de los acusados han puesto de manifiesto en este proceso, que el jurista madrileño se sintió amenazado por Pérez Lago –al que había asistido como letrado en una ocasión– y así lo denunció ante organismos oficiales pero el vilagarciano no está imputado en esta causa. n