A pleno rendimiento. Así se encuentra la nave de O Ramal que en julio del pasado año fue derribada parcialmente por un camión que realizaba labores de descarga. La consignataria Carrasco, propietaria de las instalaciones, ya ha entregado la comunicación de fin de obra en Ravella y, una vez realizado este trámite, los trabajos de almacenaje se han retomado con total normalidad. Así lo han señalado desde la empresa desde donde explican además que el parón motivado porlas obras ha sido pequeño y que no ha afectado para nada al trabajo habitual que se desarrolla en estas instalaciones.
El proyecto de reforma y reconstrucción de la nave de O Ramal fue presentado en su día en el Concello para poder obtener cuanto antes los permisos necesarios para acometer las obras que se pretendían. El proyecto se sometió a estudio por parte de la Xerencia de Urbanismo que dio el visto bueno al mismo en octubre del año que acaba de terminar.
En el informe proyectado Carrasco solicitaba el derribo parcial de la nave accidentada, así como la reconstrucción de las nuevas instalaciones. Y es que tras el accidente sufrido en julio la nave había perdido parte de su cubierta y, por lo tanto, quedaba en unas condiciones no aptas para el desarrollo de las tareas de almacenaje.
Estas instalaciones acogen cada año la descarga de toneladas de cereales y son indispensables para el desarrollo de la actividad que hace la consignataria vilagarciana que utiliza este inmueble en precario.
Bien es cierto que tanto Carrasco como otros propietarios vinculados al Puerto de Vilagarcía cuentan con unos terrenos en la zona de Comboa. Sin embargo, para construir naves en ese enclave y dejar expedito así O Ramal, es necesaria una modificación puntual del Plan Xeral de Ordenación Municipal. Un documento que, pese a estar siendo analizado por la empresa Eptisa, todavía tardará un tiempo en ser aprobado de forma inicial.
Pese a que entre las prioridades del gobierno local socialista están la de ofrecer un uso diferente al muelle de O Ramal, el hecho de que la citada modificación puntual todavía no se haya realizado obligó en su día a la reconstrucción de la nave.
El proyecto de reforma corrió a cargo del arquitecto Fernando Palomino, siempre acorde con los informes que señalaban que la estructura de la nave no había resultado dañada, pese al fuerte impacto que sufrió tras el golpe del camión.
Bien es cierto que el pasado mes de octubre el propio alcalde, Alberto Varela, reseñaba que esperaba que la modificación del PXOM fuese rápida con la intención más que nada de dejar libre O Ramal.
El accidente acontecido el pasado mes de julio en este enclave portuario se saldó afortunadamente sin daños personales, aunque el derribo obligó a cortar parte del paseo marítimo ante el riesgo de desprendimientos.