El Villalonga ganó ayer en O Couto al Ourense 0-3 y esta tarde puede convertirse en nuevo equipo de Tercera División a falta de cuatro jornadas para la conclusión del campeonato si el Porriño no gana en Mondariz. En San Pedro ya pueden poner el cava a enfriar. Bien esta tarde o bien la próxima semana, cuando reciban al Marcón, los celestes podrán festejar el alirón. Suman ya 75 puntos en una temporada soberbia. Ayer en un gran escenario como O Couto el Villalonga volvió a mostrar esa versión de equipo intratable, que domina las áreas con una superioridad incontestable.
El partido fue un monólogo celeste. Desde el inicio el equipo de Antonio Fernández jugó con intensidad y concentración. Se apoderó del centro del campo y generó ocasiones. Diego Blanco dio dos avisos. Antes del cuarto de hora llegó el 0-1. En un saque de esquina que lanzó Jesu y remató Bisti de cabeza. Tras el tanto el equipo ourensano quiso reaccionar, pero el Villalonga no dio opción. Iván Parada apenas tuvo que intervenir. El Villalonga fue creciendo en su juego con el paso de los minutos, manejando con criterio la pelota y mostrándose siempre profundo, dispuesto a asestar otro golpe a su rival. Volvieron las ocasiones arousanas. En el minuto 30, Diego Blanco falló en boca del gol y, solo tres minutos más tarde, un centro de Javi Pazos fue aprovechado por Manu para hacer el segundo. El 0-2 ya fue una losa insalvable para los locales. El Villalonga tras el descanso sin embargo salió dispuesto a dar la puntilla para cerrar el partido. Pudieron bastarle diez minutos si el árbitro no hubiese pasado por alto un claro penalti de Ivo a Diego Blanco. A la hora de partido el líder sentenció. En una jugada que definió Javi Pazos. Antonio Fernández repartió minutos. Entraron Adrián Rosal, Fonso y Héctor. El Villalonga siguió teniendo ocasiones para aumentar su ventaja. Al final logra un triunfo holgado, similar a la diferencia que maneja sobre el segundo clasificado. La temporada está siendo perfecta y una vez logrado el ascenso y el título, que puede ser cuestión de horas o días, el equipo peleará por la Copa Diputación, de la que es el actual subcampeón