Por mucho que se amenace con sanciones o se apele al buen comportamiento de la ciudadanía en materia medioambiental, algunos desaprensivos siguen sin atender a razones, atentando contra el entorno y generando focos de contaminación. En Carracedo ha aparecido uno hace tan solo unos días, un vertido de alrededor de medio centenar de neumáticos en una zona forestal, apenas a unos metros de distancia de una traída de aguas vecinal. Lo descubrieron un grupo de lugareños y comuneros cuando acometían trabajos de acondicionamiento del monte y limpieza de algunas fuentes. Al cortar la maleza fueron apareciendo las ruedas que, por lo que parece, ya llevaban allí un tiempo. Algunas prácticamente ni se ven porque ya están cubiertas casi por completo por la tierra. “Deben levar case un ano” tiradas en el lugar, calcula el presidente de la Comunidad de Montes de Carracedo, Manuel Gago, que se puso en contacto con los guardas forestales en busca de algún dato que pudiera servir para identificar al autor del vertido. “Non saben nada” sobre quién pudo depositar las ruedas, confirma el presidente de los comuneros, uno de los vecinos que participó en las tareas de limpieza del entorno.
Están depositados en el margen de una pista, en una zona
de fácil acceso
Los neumáticos se encuentran “a poucos metros das minas de auga”, pero considera que no hay peligro de contaminación para la traída de la que se surten los vecinos. El punto de vertido es fácilmente accesible con vehículo desde la carretera Caldas-Catoira. Además, quien tiró las ruedas ni se molestó en intentar esconderlas de los ojos de cualquiera que pudiera pasar por allí: las depositó en el margen de una pista, en un pequeño desnivel, pero perfectamente visibles. Solo la maleza las camuflaba en parte.
El presidente de la Comunidad de Montes confirmó que están realizando gestiones para tratar de retirar el vertido de la zona. “Hai uns días falei co Concello” para pedirles que acudan a recoger las ruedas. Los servicios municipales ya tuvieron que acudir otras veces a la parroquia de Carracedo a eliminar vertidos. Porque esta no es, por desgracia, la primera vez que aparecen en el monte vertederos ilegales. En una ocasión “tiraron sofás” y muebles “e retirounos o Concello”, recuerda Gago.