El Pleno de Vilanova aprobó esta semana por unanimidad la moción socialista que pedía mejoras para el recinto deportivo de O Terrón. Pero lo hizo tras un duro enfrentamiento verbal entre el alcalde popular, Gonzalo Durán, y el portavoz socialista, Javier Dios, acusándose, respectivamente, de “tráfico de influencias” y de “fraude de ley”. 

El PSOE pedía medidas para acabar con la supuesta inseguridad en el acceso a los vestuarios, entrada no visible desde el campo y fácilmente accesible a ladrones durante los entrenamientos, denunciaban. El alcalde indicó entonces que a este complejo “le falta un edificio anexo, la piscina de la que tú, Javier, votaste en contra en la Diputación”, espetó al recordar la desestimación provincial a la ayuda millonaria solicitada. 

El socialista recordó que una sentencia judicial declaró que el gobierno vilanovés actuó “en fraude de ley” en la presentación del proyecto para intentar hacerse con la ayuda de forma irregular. A lo que Durán añadió que el Ayuntamiento ha denunciado por lo penal a la Diputación, convencidos de que en el reparto de aquellos fondos se obró con “tráfico de influencias”, favoreciendo a concellos de la izquierda.