Nunca podremos olvidar a una persona tan maravillosa. Todos los que llegamos a conocerle debemos sentimos muy dichosos por todos los momentos que pudimos compartir a su lado.
Sin importar su corta edad nos mostró que era una persona muy dedicada a su empresa y a sus amigos; que tenia fijos sus objetivos en la vida y que siempre los tenia en mente. ¡Cuánto lo echamos de menos en nuestra Peña La Junquera! Fueron tantos años con la fiesta del agua, los carnavales, la cabalgata de reyes, las fiestas… Y lo mismo se podría decir del deporte vilagarciano. Siempre dispuesto a patrocinar lo que se le pedía con un solo objetivo: Educar a sus hijos en ese ambiente sano y divertido del que hoy, por desgracia, él ya no puede hacerlo. Fue un amigo que siempre nos brindó su ayuda. Su espíritu descansa, pero siempre estará con nosotros en nuestros corazones. Era un gran padre, un buen hijo, un gran hermano y un super amigo. Dios quiso llevarlo y de hoy en adelante él nos cuidará desde los cielos. Lo echaremos de menos sobre todo en nuestras reuniones. Era alguien muy especial que siempre nos hacía sentirnos felices, que nos unía.
Adiós, querido amigo. Que Dios te cuide.