¡AY, cómo son estos peperos! Por un lado, rompen a martillazos un ordenador –cómo quedó el de Bárcenas; no se salvó ni un céntimo de la contabilidad B– y, por otro, tienen a unos sabuesos husmeándolo todo en internet en busca de un tesoro que valga millones. Y lo peor es que lo encuentran, ¡vaya si lo encuentran! Tras la visita de Rajoy a los juzgados, en la que aseguró que él se dedicaba a la política y que de dinero no sabía nada, Pedro “La sonrisa” Sánchez salió escopetado a pedir su dimisión, porque tenía que saber por narices de la pasta. Pues ahora el PP ha difundido un vídeo en el que Goyo Martínez, tesorero del PSOE con el primer Sánchez, asegura en una comisión parlamentaria que él no informaba a su jefe sobre las cuentas y que los secretarios generales no saben de esas cosas. Habrá que premiar con una buena costilleta a los sabuesos.