Lo malo que tienen los secretos a voces es que todo se sabe y las voces no se callan. Varela tiene ahora mismo un puzzle de tres piezas encima de la mesa, que parece que le sale, pero que solo se ve el dibujo completo a veces. De hecho ese mejunje parece ser la única salida, el único rayito de luz que le entra en esa Alcaldía cerrada a cal y canto que del poco airearla y del mucho creerse superior a los demás, les tiene ensimismados.
Varela tiene 8 concejales de 21, más los dos del BNG que tiene hipnotizados. Y ahora se dedica a jugar todas sus fichas día sí y día también al voto del díscolo de IU (triste y único mérito que se le puede conceder al concejal que entró de rebote para intentar destrozar desde dentro al segundo mayor grupo de la oposición). Gracias a él han conseguido desatascar las terrazas, las ordenanzas fiscales y ahora enchufar a Lino Mouriño en el Puerto, a pesar de que tiene el peor currículum de toda Vilagarcía. Me encantaría que fuese capaz Alves de decir una sola razón que justifique su respaldo al socialista, en contra de lo que ha votado la parte oficial y parece que la única legítima del partido.
Al acabar el pleno una persona me dijo: “Este gobierno gobierna con el lema del “ALVES-e quien pueda”. Y creo que tiene más razón que un santo. Miguel Alves empieza a sacar la patita. Se le ve el plumero. Está más obsesionado en ser el enemigo de IU que ser amigo de Varela. Y Varela cree que no. Pero sí. Jugar con petardos y recortarle la mecha tiene el serio riesgo de que te puede explotar en las manos y en la cara en cualquier momento. Alguno parece no ver el riesgo, pero la mecha es cada vez más corta. Tiene que ser horrible la sensación de vértigo cada vez que hay una votación porque nunca sabes al 100% si te va a salir la jugada pactada, sobre todo porque son muchas voces en la cabeza del díscolo dándole órdenes y habrá momentos, muchos, en los que haya órdenes contradictorias. A ver qué hace…
Lo que hemos sacado en limpio del último pleno es que Miguel Alves tendría que cambiarse de sitio. Está desubicado. Tendría que pegarse al BNG y al PSOE, que ahora parece que le quieren (utilizar). De hecho solo falta que este “bipartito y medio” que está montado en Ravella levante un muro al más puro estilo Trump (ya he escrito aquí sobre el tema) porque la pequeña guerra mundial que intentan desatar es imprevisible. Pero como todo el mundo sabe, esta actuación se parece mucho más a Gila hablando por teléfono con el enemigo que al comandante en jefe de los Estados Unidos… 
Y claro. Hay que hablar de cafés. De los que se toman los del PSOE con Alves, tal y como se confirmó, a pesar de que Alves no es portavoz de nada ni de nadie (“Bueno”, perdón, de los 12 que presume se reúnen con él para atacar a IU). Lo mejor es que como premio, en lugar de darle un sillón en el consejo del Puerto la recompensa ha sido, supongo, un simple azucarillo. Poca recompensa por la vergüenza de tener que votar de la mano y seguir saliendo en los titulares… Con Ríos, lo de los cafés ya no va por tazas, ya va por termos enteros. Si la relación del PSOE con el BNG fuese una aspiradora, el portavoz ya estaría en la parte alta del tubo y a punto de ser engullido por la bolsa. Pero él no se entera. Es la técnica del palo y la zanahoria en estado puro. De momento está entretenido con la zanahoria, pero el palo acabará llegando… Tiene que ser duro que ni los tuyos te quieran como portavoz y que estés más preocupado de mimar al PSOE que de defender tu programa. Allá él. Y más duro aún que dirigentes de más peso del PSOE que los que hay en Ravella se hayan tomado cafés conmigo y me hayan dicho lo que me dijeron… El día que escriba un libro…
Y por último un recadito para el exconcejal que presume de haber dimitido hasta tres veces y que ahora viene con aires de gran maestro a querer impartir clases de lenguas antiguas. Menos presumir y menos confundir el latín con el griego, que luego quedas en ridículo ante los que todavía no te conocían. Le recomiendo al “profesor” más horas de lectura y estudio antes de abrir la boca para pifiarla y faltar al respeto. 
Ahora que veo que se aburre y que le llevan los demonios por “ponerle café a cuatro viejas de Rubiáns que juegan al bingo”, como él mismo dijo micro en mano en el pleno aprenda de Demóstenes, un afamado orador griego que acostumbraba a recitar con piedras en la boca. Aprenda de él y si quiere, practique para que además de tragar sapos le ponga piedras de guarnición.
*Portavoz del grupo municipal del Partido Popular en Vilagarcía