Jéssica Bouzas se despide del WTA 1000 Cincinnati después de caer ante la ucraniana Svitolina por 6-4 y 6-1. Bouzas, que llegó al encuentro tras vencer a la italiana Bronzetti después de beneficiarse del "lucky loser", plantó cara a la que fue número tres del mundo, pero sus esfuerzos se desvanecieron en el segundo set.
Cierto es que la vilagarciana afrontó el encuentro sin ninguna presión, tomándoselo como una preparación para la gira americana que se le avecina y consciente de que enfrrente tenía a una rival muy dura. Elina Svitolina comenzó dominando el enfrentamiento, con mayor contundencia en el saque y peloteando mejor que la tenista arousana. Bouzas supo sobreponerse a las constantes devoluciones de la ucraniana, sufriendo en el primer set pero consiguiendo poner en aprietos a Svitolina durante unos momentos.
Svitolina volvía a ponerse por delante, con la arousana regalando numerosas faltas dobles y más débil en el saque. Lo cierto es que la ucraniana ganaba con facilidad el servicio, a la par que recibía mejor que Bouzas. El primer set parecía igualarse, al punto de que el marcador se posicionaba en 5-4 a favor de la ucraniana y con la vilagarciana en su mejor momento del enfrentamiento. Finalmente, Svitolina se impuso y cerró el set con un 6-4.
En el segundo set las opciones para Jéssica Bouzas fueron practicamente nulas, ya que desde el inicio la ucraniana dominó en el saque y devolvía la mayoría de las pelotas, llevando a la vilagarciana a realizar un gran esfuerzo. Svitolina, que es actualmente la número 29 del ránking WTA, volvió a ponerse por encima, dominando de nuevo en todos los aspectos del juego y llevando a Bouzas al límite. A pesar de la dificultad, la vilagarciana volvió a mostrar su garra, sin dar el encuentro por perdido hasta el último minuto. Finalmente, la ucraniana Svitolina cerró el segundo set con un 6-1 a su favor.