El Ayuntamiento de A Pobra inició esta semana las obras de ampliación de su refugio o centro de recogida de animales, ubicado en una parcela del polígono industrial de A Tomada, para mejorar las condiciones y atención de los animales abandonados. La actuación, que cuenta con un presupuesto que asciende a 47.975 euros, está dirigida de manera especial a los felinos, con la rehabilitación de un espacio independiente adaptado a sus necesidades específicas. 

Se contempla la adaptación de tres contenedores marítimos previamente adquiridos como módulos de gateras y que se dividirán interiormente con tabiquería ligera revestida de vinilo lavable, lo que permitirá duplicar el número de cubículos disponibles. Cada espacio contará con puerta de chapa de aluminio, ventanas para iluminación y ventilación natural y carpintería tipo mosquitera para garantizar la circulación del aire sin que puedan escapar los animales. 
 

También se incluye la previa preparación del terreno, con una solera de hormigón armado como base para los módulos, cada uno de los cuales dispondrá de un patio exterior cerrado con estructura metálica, lo que permitirá que los gatos puedan tener un espacio seguro; se ejecutará un pasillo cerrado de comunicación entre módulos, que actuará como elemento de seguridad para evitar fugas, a la vez que facilitará el acceso del personal. Y se instalará una nueva red de recogida de aguas fecales para mejorar la salubridad y limpieza de las instalaciones.
 

El alcalde y responsable del área de Benestar Animal, José Carlos Vidal, manifestó que “o benestar animal é unha prioridade para nós. Con esta ampliación damos un paso importante cara a un refuxio máis funcional e adaptado ás necesidades reais que temos”. El primer edil hizo un llamamiento a la "responsabilidade das persoas no coidado das súas mascotas”.