La música marcó buena parte de la programación del Carme dos Pincheiros en sus tres primeros días y la jornada de clausura de ayer no le fue a la zaga. Varias formaciones, entre las que se encontraban la banda de gaitas Os Castro de Ames, los grupos de gaitas Xiada, Os Caraveiros, Os Argalleiros y O Ar de Loureda y la Banda de Música de Lantaño, de Portas, entraron a media mañana en la villa, tras el lanzamiento de las tradicionales bombas de palenque, y recorrieron las calles para animar a la gente con sus pasacalles. La última de esas agrupaciones ofreció un concurrido concierto en la alameda. Y los Gigantes y Cabezudos realizaron al mediodía uno de sus últimos bailes al ritmo de la música del grupo de gaitas Trécola, pues ocho horas después tuvo lugar su desfile de despedida.
El gran protagonismo de esta última jornada fue de los niños, especialmente, durante buena parte de la mañana y de la tarde. Para ellos fue el parque de hinchables "Pincheirolandia", que se instaló en la Praza Alcalde Segundo Durán, y que incluyó castillos con zonas de escalada y descenso y también para saltos, así como una pequeña pista de fútbol y baloncesto, sin que les importase guardar largas colas para subirse y divertirse en ellos. Uno de los momentos cumbre de las actividades infantiles fue la fiesta de la espuma, que se celebró en la Praza Alcalde Segundo Durán con alta participación. Junto a los chiquillos, fueron bastantes adultos los que se sumaron a esa actividad, ya fuese envolviéndose en la espuma o mojándose, o bien inmortalizando a sus chiquillos con las cámaras de sus teléfonos móviles.
Ya por la noche, el grupo The Broken Peach ofreció un concierto en la Praza Alcalde Segundo Durán y a las doce y cuarto de la noche empezó el tradicional espectáculo de fuegos artificiales y el combate naval, que varios cientos de personas pudieron seguir en directo desde diferentes puntos dell paseo marítimo de O Areal, así como desde la explanada portuaria. A su conclusión dio comienzo la última sesión musical de estas fiestas por este año y que estuvo amenizada por Chocolate sobre un escenario montado en la misma plaza. Los pobrenses y visitante ya cuientan los días para que regrese el Carme dos Pincheiros.