La Comunidad de Montes de Noalla mostró su malestar con el Concello por el cierre de la finca de “Con do Paxaro”, utilizada para el aparcamiento de vehículos en la zona de A Lanzada. El presidente de los comuneros, Roberto Garrido, explica que la administración local colocó “unha especie de paus de luz” en la entrada para evitar el paso de coches, después de que algún usuario arrancase las señales de prohibido aparcar que había instalado en la zona el Concello.

Fuentes municipales recuerdan que se trata de un espacio protegido por la Rede Natura y que desde Patrimonio de Galicia han instado al Concello a actuar para controlar la entrada de vehículos en esta parcela, propiedad de los comuneros, al poder suponer la degradación de un hábitat natural de interés comunitario. Asimismo, defienden la colocación de barreras para impedir el paso de vehículos después de que algún usuario arrancase las señales de prohibición, lo que propició que otros conductores aparcasen en la zona.

Los comuneros, sin embargo, se muestran contrarios a la gestión del alcalde, al que acusan de querer “evacuar Noalla” y quitar su turismo y de ofrecer “unha mala imaxe” a los visitantes que cada año recibe la parroquia, especialmente, en los meses de verano.