Las obras de la segunda fase de rehabilitación del Pazo de Quintáns, en Noalla, avanzan en el nuevo espacio multifuncional, donde ya solo está pendiente la carpintería exterior que será de cristal. El alcalde, Telmo Martín, visitó hace unos días la actuación, acompañado del concejal de Mantenimiento y Servicios, Yago Torres, y los directores de obra durante la prueba de la iluminación interior.

Este espacio multifuncional permitirá acoger pequeños eventos educativos, sociales o culturales, con una capacidad de aproximadamente 128 personas sentadas y 222 de pie. Se trata de una edificación complementaria al edificio noble y al propio conjunto del pazo, prácticamente adosada al muro perimetral de cierre del patio de labranza. 

Su diseño, en piedra, madera y vidrio principalmente, permite tener una conexión visual permanente entre la edificación polivalente proyectada y el conjunto del Pazo de Quintáns, así como el edificio noble.
También, se ha limpiado la finca oeste anexa para aparcamiento de 27 plazas, estando dos de ellas adaptadas para personas con movilidad reducida. 

En las zonas no aprovechables, debido a la geometría del espacio destinado a aparcamiento, se propone la creación de una jardinera con arbustos de bajo porte y se acristalará el pozo que existe en el centro de la parcela.

Asimismo, entre las actuaciones de esta segunda fase destacan la recuperación del antiguo hórreo, así como la adecuación de los ‘parladoiros’ del pazo con nueva iluminación y la habilitación de itinerarios peatonales. l