Adjudican el Vilablues a una empresa que aparece en el cartel desde hace días

La Xunta de Goberno de Vilagarcía adjudicó ayer, a las dos menos cuarto de la tarde, el festival Vilablues. La beneficiaria es una pyme que ya aparece en el cartel desde el 5 de julio, incluso desde antes que finalizase el plazo para presentar ofertas, y a la que se le reconoce la idea del evento.
La de la Asociación Galiza Blues fue la única propuesta que recibió Ravella para este concurso, que se llevó a cabo por un procedimiento abierto y simplificado y que llamó la atención por sus plazos y formas. Será a partir de ahora cuando los adjudicatarios podrán comenzar a contratar a los artistas, entre los que se encuentran Raimundo Amador y Sax Gordon, procedente este último de Chicago. Así lo dijo el propio alcalde, Alberto Varela, que aseguró que las contrataciones se harían, “sí o sí”, después de adjudicado el concurso. Sin embargo, el cartel y el programa ya se anunciaron desde hace días como cerrados. Es más, uno de los promotores de este evento, Marcos Coll, ahora desvinculado del festival, desveló en su cuenta de Facebook que varias de las actuaciones las había programado él mismo antes de decidir dejar la organización del Vilablues, hace cuatro meses.
En cualquier caso, los tiempos son apretados, aunque el regidor se mostró convencido de que es viable organizar un festival en apenas dos días. Y es que está previsto que el Vilablues, con un potente cartel, comience este mismo viernes. La oferta presentada por Galiza Blues para hacerse con el Vilablues plantea un presupuesto de 29.970 euros sin IVA y de 36.273,7 con IVA. Una resolución de Alcaldía estima que se trata de la mejor oferta “calidade- precio”, aunque en realidad la competencia era nula.

Titularidad
Los problemas con el Vilablues surgen este año, ya que hasta ahora se lo habían adjudicado directamente a Mulas, que en esta edición también se encarga de la producción. Para ello, la Xunta de Goberno optaba por dividir en dos el contrato, de tal forma que no superase los 15.000 euros. Este año, la Ley de Contratos es muy estricta con estas cuestiones y obliga a sacarlo a concurso. Precisamente desde Ravella se ampararon en esta cuestión para defender el procedimiento. Pero en este sentido cabe recordar que, aunque entró en vigor en marzo, el nuevo marco legislativo lleva publicado desde noviembre.
En cualquier caso, y aunque el pliego cumple con lo establecido en la legislación, lo que llama la atención es el escaso margen que existe para las contrataciones de artistas que, según explicó una jurista, nunca podrían llevarse a cabo antes de adjudicado el concurso. Algo que reconoció el propio alcalde.
A todo esto hay que añadir que uno de los promotores del evento, Gumersindo Meijón, inició en marzo los trámites para registrar el nombre comercial Vilablues. Ravella reconoce que la propuesta del evento surge de la iniciativa privada, aunque siempre se adjudicó como municipal. l