Mar muestra a las cofradías de Arousa su disposición a financiar otro paro en el libre marisqueo

Mar muestra a las cofradías de Arousa su disposición a financiar otro paro en el libre marisqueo
Cada día son menos los barcos que acuden a faenar a las zonas de libre marisqueo que siguen abiertas | GONZALO SALGADO

Una situación agónica. Así definen las cofradías de la Ría de Arousa la situación actual de los bancos de libre marisqueo. Patrones mayores de los diferentes pósitos se reunieron en Santiago con el director general de Pesca, Antonio Basanta, para poner sobre la mesa la posibilidad de un paro. “Non nos queda outra. Nestes momentos non hai produto, ese é o problema, e non compensa saír ao mar”, explica el patrón mayor de Rianxo, Miguel Iglesias. La Consellería do Mar ya ha mostrado su disposición a financiar una parada temporal, pero esta tendrá que esperar hasta que estén disponibles las condiciones que marca el nuevo Fondo Europeo Marítimo, de Pesca e Acuicultura (Fempa). Esas posibles ayudas –de las que también podría beneficiarse el marisqueo a pie– no estarían disponibles hasta enero. La administración autonómica expone que está a la espera de que el Gobierno central publique el Real Decreto que regulará las paradas definitivas y temporales y que actualizará las cuantías. Mientras tanto, y salvo nuevo aviso, los mariscadores de a flote seguirán faenando en O Bohído, Cabío y las otras zonas.  Algunos, prefieren quedarse en casa. Hay rañeiros que –en las últimas jornadas– volvieron a sus casas con una facturación de “50 ou de 20 euros, dependendo do día e non compensa nin para a gasolina”, expone el rianxeiro.


Ante esta situación los patrones mayores plantearon abiertamente a la Consellería la posibilidad de un nuevo paro biológico como el que se hizo en la anterior campaña. Eso sí, buscando las posibilidades de ayudas que puedan existir para que los rañeiros no se queden sin percibir ni un solo euro durante los meses que dure ese cierre. Todo teniendo en cuenta que la situación ya a día de  hoy y sin que se haya cumplido ni siquiera un mes desde el inicio de la campaña es “desesperante”.


Miguel Iglesias explica que “primeiro tería que decretar o peche dos bancos marisqueiros a Consellería do Mar e, a partir daí, pois os afectados solicitar as axudas que poidan estar dispoñibles”. Por el momento mañana mismo los patrones mantendrán una reunión con el ISM para ver la posibilidad de que el sector de a flote pueda acogerse al cese de actividad. “Non descartamos o de que exista a opción de poderse acoller ao cese de actividade e tamén ao paro, este último financiado pola Xunta”, manifiesta el patrón rianxeiro.
Lo que tienen claro desde la cofradía es que la situación de paro tiene que venir acompañada de una apuesta por parte de la Consellería do Mar en materia de regeneración, dragado, limpieza y más acciones. “Algo pasa e hai que solucionalo. Se hai un paro ten que apostarse por este tipo de cousas”, manifesta Iglesias.


Por el momento la unión de las cofradías afectadas por la situación de libre marisqueo es evidente al entender que “ou imos todos a unha” o el sector está condenado a su desaparición.


La esperanza ni siquiera está puesta en la campaña navideña, que acostumbra a ser muy buena para el sector marisquero, sobre todo por los precios que el producto alcanza en lonja en esas fechas tan señaladas. “Se non hai produto, se non hai ameixa nin hai berberecho, en ningún caso pode haber unha boa campaña”, matizan los patrones. Desde la Consellería aseguran que la situación del marisqueo les preocupa y el responsable del departamento, Alfonso Villares, incide en que este no ha sido un año propicio para el crecimiento de los moluscos. En todo caso en los bancos de Arousa la situación de caída de la productividad es desde hace ya mínimo una década.


La Consellería apunta que entre 2017 y 2023 se aprobaron para la Ría de Arousa un total de 95 proyectos de conservación y restauración por un importe de casi cuatro millones de euros. Explican desde este departamento que esos proyectos permitieron realizar mejoras en el sustrato mediante arados y el aporte de áridos sobre un total de 2,6 millones de metros cuadrados, así como sembrar más de 52 millones de unidades de almeja en distintos puntos. 

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