Las ANPA de Vilagarcía reclaman a Ravella la mejora de la sala infantil de la Biblioteca Municipal. La unión, iniciativa de los padres del colegio Anexo, fue unánime con motivo de las carencias que, a su parecer, existen en dicha sección,
Las asociaciones de padres y madres de los centros educativos vilagarcianos solicitan al Concello que dé solución a los problemas detectados en la sala infantil de la Biblioteca Municipal. A través de un escrito presentado por medio del registro electrónico del Concello, las ANPA reclaman la resolución de las problemáticas detectadas.
En primer lugar, los progenitores exponen que el espacio disponible no solo resulta escaso sino que, además, la iluminación es insuficiente. Como responsables del bienestar de sus pequeños, añaden que la sección está ubicada en un lugar de paso y muy cercano a la puerta de entrada al edificio, por lo que los niños se ven obligados a respirar el humo del tabaco de los lectores adultos que salen al exterior a fumar, con las molestias e inconvenientes que ello conlleva. Adicionalmente, la sala cuenta con únicamente tres mesas, una de ellas para primeros lectores.
Respecto a los fondos bibliográficos, las ANPA aseguran que están obsoletos y son visiblemente escasos, por lo que piden al Concello que actualice y amplíe las referencias destinadas al público infantil.
En relación a la gestión, los padres constatan que la institución continúa adscrita a la plataforma Meiga, si bien cientos de bibliotecas públicas de la comunidad han implantado Koha. En suma, afirman que el edificio se cierra cuando la bibliotecaria goza de vacaciones, bajas o permisos, siendo inexistentes actividades de dinamización a la lectura.
Desarrollo infantil
Como parte de su reclamación, los padres recuerdan que leer es esencial para el desarrollo cognitivo de los pequeños y que el mayor porcentaje de lectores frecuentes se sitúa en la edad infantil y adolescente, disminuyendo progresivamente a partir de los 15 años. Así, argumentan que, conforme a la Lei 17/2006 do libro e da lectura en Galicia, las bibliotecas públicas deben garantizar el acceso igualitario y democrático a la cultura.