Hace años que profesionales y pacientes reclaman una ampliación del centro de salud de Baltar, una necesidad reconocida por las propias administraciones pues, a pesar de que el ambulatorio de Vilalonga supuso un desahogo, las instalaciones se han quedado pequeñas ante una población flotante y de segundas residencias cada vez por temporadas más largas y que no deja de crecer.
El propio Concello ha dado pasos y en el pleno del lunes desveló que Sanidade descarta una ampliación hacia la zona ajardinada anexa al edificio y su propuesta pasa por levantar una planta más. Sin embargo, esta obra no aparece en el plan de infraestructuras para varios años presentado hace unos meses por la Xunta, donde sí hay otras obras en la comarca. Y ante la insistencia del PSOE, el gobierno local dijo con la boca pequeña que hay un compromiso para hacerlo. El alcalde, Telmo Martín, también avanzó que ayer tenía previsto reunirse con el conselleiro.
Todo ello fue a raíz de la moción defendida por la portavoz Ainhoa Fervenza y que el Ejecutivo del PP rechazó con su mayoría. En ella recordaba que en 2019 se anunció una ampliación que se tradujo en una redistribución de espacios a su parecer nada idónea. “Son parches”, apuntó su compañera de oposición Sandra Fernández Agraso (BNG).
Fervenza cree que además ha sido a costa de “recortes para los pacientes” pues se han hecho consultas “mínimas” con tablones modulares cogiendo el espacio de la sala de espera de Pediatría y el baño para niños, entre otras cuestiones como haber hecho “una sala de extracciones en medio de la entrada”. Para María Deza, teniente de alcalde y usuaria del servicio “antes y después”, el cambio de Pediatría le parece “francamente ben” porque se usó una “sala infrautilizada” para un médico más. No obstante, reconoció que la situación de Baltar también preocupa al gobierno local.
El tema causó algunos cruces de acusaciones sobre si se estaba banalizando, y en un momento dado, el regidor le espetó a la socialista que la ministra de Sanidad prometió en el Consejo Interterritorial de Sanidade con las CCAA un plan de 4.000 millones de euros para paliar las carencias de la atención primaria, que asume el 80 % de la carga asistencial y recibe el 14 % de los fondos. Y de esa cantidad, 1.000 eran para este año, pero “ao final, puso 176 millóns, nin sequera a metade. Esa é a vergoña que temos cos señores de Madrid”, exclamó.
La socialista también mostró en la sesión su “preocupación” por la existencia de siete bajas laborales en la Policía Local, la “mayoría por problemas psicológicos”, aseguró, así como por un agente que “lleva de vacaciones desde agosto. Son forzosas? Es un tema muy controvertido cuando no reza la prevaricación”, preguntó al gobierno local. Sin embargo, este no contestó.
Fue durante la aprobación, por unanimidad de todos los partidos, de prorrogar por otros cuatro años el convenio con Vicepresidencia para los procesos de contratación de agentes.