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jueves | 2 mayo | 2024
El vilanovés Juan Manuel Vidal Padín fue detenido en el marco de la “resaca” del “Poseidón”, el narcosubmarino que apareció hundido en Vilaxoán hace algo más de un año. Conocido como “el Burro”, cayó precisamente a escasos metros de donde se localizó el semisumergible, en la inmensa propiedad situada a pie del paseo de Canelas, en Sobradelo.
La detención se produjo en el marco de una operación conjunta de Policía Nacional, Guardia Civil y Vigilancia Aduanera, que desde primera hora de la mañana desplegaron sus efectivos por la zona. El dispositivo se enmarca en el mismo operativo que, hace una semana, conllevó la investigación de una decena de personas por las narcolanchas que aparecieron en O Barbanza en 2023, unas semanas antes del “Poseidón”.
El 5 de abril, la titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Vigo puso en libertad a tres personas y dictó la busca y captura de otras tantas. Solo cuatro días después, ya se produjo el primer arresto, con el que retorna al primer plano un viejo conocido de los cuerpos de lucha contra el tráfico de drogas: Juan Manuel Vidal Padín, “el Burro”, probablemente una de las trayectorias más escurridizas en O Salnés.
El despliegue de los agentes en plena orillamar vilaxoanesa sorprendió a todos los que a primera de la mañana circularon por la zona, incluidos padres, alumnos y profesores que se dirigían al instituto. Las puertas de Náutica Vidal estaban custodiadas por una docena de agentes de las unidades de intervención de Policía Nacional y Guardia Civil. En el interior, a través de los amplios ventanales se podía ver una intensa actividad. Pronto asomaron, también, las disciplinadas unidades caninas, en búsqueda de dinero o sustancias estupefacientes.
La imagen llamó la atención de no pocos vecinos de una zona muy transitada, que se pararon curiosos, y también de los conductores, que incluso frenaron la velocidad para ver mejor o para sacar alguna fotografía.
El registro se prolongó durante horas. Presente estaba el verdadero protagonista: “el Burro”, que se dejó ver, custodiado por los policías, hacia el mediodía. El inmueble, que incluye dos viviendas además de la inmensa nave dedicada al negocio náutico y de un almacén, es de importantes dimensiones. Los agentes estuvieron picando el suelo en un sótano y también fue necesario romper una puerta de cristal de una de las edificaciones, para poder proceder al registro ordenado por el Juzgado. Por el momento, no trascendieron datos oficiales, más allá de que se trata de una operación conjunta contra el tráfico de drogas.
Hacia el mediodía, los efectivos sacaron del interior varias cajas, que introdujeron en un vehículo para su custodia hasta el juzgado.
El 22 de febrero de 2023 aparecían abandonadas en las playas de Espiñeirido y O Vilar, en Ribeira, dos lanchas como las que los narcotraficantes utilizan para transportar droga. Unas semanas después, un bateeiro descubría la punta de un submarino a una milla del puerto de Vilaxoán. Con su remolque a tierra (que tardó un día debido al bravo oleaje), se reveló el nombre del sumergible: Nada más y nada menos que “Poseidón”, rey de los mares. Ya por entonces, se vincularon oficialmente ambos sucesos. La investigación siguió su curso, ya sin la presión mediática, hasta que a principios de mes regresaron a primer plano.
Una operación dirigida por el número 5 de Vigo dejaba una decena de investigados, tras registros tanto al sur como al norte de la Ría de Arousa. También una advertencia: Orden de búsqueda para tres personas. Al poco cayó, en Gijón, un antiguo colaborador de Sito Miñanco. Hace unas horas lo hacía Juan Vidal Padín, un empresario al que desde principios de siglo se le otorga un papel principal en el negocio de la droga, sin que tal dominio llegase a probarse. El seguimiento al vilanovés desencadenó la famosa operación “Campeón” y la caída de Dorribo. Pero “el Burro” resistió el embiste. Al menos hasta hoy.
